domingo, 18 de noviembre de 2007

Eso...eso es el Fútbol ! ! !

Hola equipo y seguidores del Deportivo Psicología, antes que nada este departamento de prensa y quienes lo componen quieren disculparse por el silencio de radio de las ultimas semanas, este se debe a que nuestro personal esta comprometido también con otros proyectos y a veces no hace tiempo a encargarse de todo, en fin, habiendo hecho esta aclaración les dejo acá abajo, si se quiere a modo de disculpa, un cuento espectacular de Fontanarrosa y en la sección vídeos motivadores, los mas vagos encontraran este mismo cuento pero actuado por Luis Brandoni.
Viejo con árbol A un costado de la cancha había yuyales y, más allá, el terraplén del ferrocarril. Al otro costado, descampado y un árbol bastante miserable. Después las otras dos canchas, la chica y la principal. Y ahí, debajo de ese árbol, solía ubicarse el viejo.Había aparecido unos cuantos partidos atrás, casi al comienzo del campeonato, con su gorra, la campera gris algo raída, la camisa blanca cerrada hasta el cuello y la radio portátil en la mano. Jubilado seguramente, no tendría nada que hacer los sábados por la tarde y se acercaba al complejo para ver los partidos de la Liga. Los muchachos primero pensaron que sería casualidad, pero al tercer sábado en que lo vieron junto al lateral ya pasaron a considerarlo hinchada propia. Porque el viejo bien podía ir a ver los otros dos partidos que se jugaban a la misma hora en las canchas de al lado, pero se quedaba ahí, debajo del árbol, siguiéndolos a ellos.Era el único hincha legítimo que tenían, al margen de algunos pibes chiquitos; el hijo de Norberto, los dos de Gaona, el sobrino del Mosca, que desembarcaban en el predio con las mayores y corrían a meterse entre los cañaverales apenas bajaban de los autos.
—Ojo con la vía alertaba siempre Jorge mientras se cambiaban.
—No pasan trenes, casi tranquilizaba Norberto.
Y era verdad, o pasaba uno cada muerte de obispo, lentamente y metiendo ruido.
—¿No vino la hinchada?
ya preguntaban todos al llegar nomás, buscando al viejo.
--¿No vino la barra brava?
Y se reían. Pero el viejo no faltaba desde hacía varios sábados, firme debajo del árbol, casi elegante, con un cierto refinamiento en su postura erguida, la mano derecha en alto sosteniendo la radio minúscula, como quien sostiene un ramo de flores.Nadie lo conocía, no era amigo de ninguno de los muchachos.
—La vieja no lo debe soportar en la casa y lo manda para acá ! ! bromeó alguno.
—Por ahí es amigo del referí —dijo otro.
Pero sabían que el viejo hinchaba para ellos de alguna manera, moderadamente, porque lo habían visto aplaudir un par de partidos atrás, cuando le ganaron a Olimpia Seniors.Y ahí, debajo del árbol, fue a tirarse el Soda cuando decidió dejarle su lugar a Eduardo, que estaba de suplente, al sentir que no daba más por el calor. Era verano y ese horario para jugar era una locura. Casi las tres de la tarde y el viejo ahí, fiel, a unos metros, mirando el partido. Cuando Eduardo entró a la cancha —casi a desgano, aprovechando para desperezarse— cuando levantó el brazo pidiéndole permiso al referíí, el Soda se derrumbó a la sombra del arbolito y quedó bastante cerca, como nunca lo había estado: el viejo no había cruzado jamás una palabra con nadie del equipo.El Soda pudo apreciar entonces que tendría unos setenta años, era flaquito, bastante alto, pulcro y con sombra de barba. Escuchaba la radio con un auricular y en la otra mano sostenía un cigarrillo con plácida distinción.
—¿Está escuchando a Central Córdoba, maestro? —
medio le gritó el Soda cuando recuperó el aliento, pero siempre recostado en el piso.El viejo giró para mirarlo. Negó con la cabeza y se quitó el auricular de la oreja.
—No sonrió.
Y pareció que la cosa quedaba ahí. El viejo volvió a mirar el partido, que estaba áspero y empatado.
--Música dijo después, mirándolo de nuevo.
Algún tanguito? —probó el Soda.
—Un concierto. Hay un buen programa de música clásica a esta hora.
El Soda frunció el entrecejo. Ya tenía una buena anécdota para contarles a los muchachos y la cosa venía lo suficientemente interesante como para continuarla. Se levantó resoplando, se bajó las medias y caminó despacio hasta pararse al lado del viejo.
—Pero le gusta el fútbol —le dijo—. Por lo que veo.
El viejo aprobó enérgicamente con la cabeza, sin dejar de mirar el curso de la pelota, que iba y venía por el aire, rabiosa.
—Lo he jugado. Y, además, está muy emparentado con el arte —dictaminó después—.
Muy emparentado.El Soda lo miró, curioso. Sabía que seguiría hablando, y esperó.
—Mire usted nuestro arquero —efectivamente el viejo señaló a De León, que estudiaba el partido desde su arco, las manos en la cintura, todo un costado de la camiseta cubierto de tierra—. La continuidad de la nariz con la frente. La expansión pectoral. La curvatura de los muslos. La tensión en los dorsales —se quedó un momento en silencio, como para que el Soda apreciara aquello que él le mostraba—.
--Bueno... Eso, eso es la escultura...El Soda adelantó la mandíbula y osciló levemente la cabeza, aprobando dubitativo.
—Vea usted —el viejo señaló ahora hacia el arco contrario, al que estaba por llegar un córner— el relumbrón intenso de las camisetas nuestras, amarillo cadmio y una veladura naranja por el sudor. El contraste con el azul de Prusia de las camisetas rivales, el casi violeta cardenalicio que asume también ese azul por la transpiración, los vivos blancos como trazos alocados. Las manchas ágiles ocres, pardas y sepias y Siena de los mulos, vivaces, dignas de un Bacon. Entrecierre los ojos y aprécielo así... Bueno... Eso, eso es la pintura.
Aún estaba el Soda con los ojos entrecerrados cuando al viejo arreció.—Observe, observe usted esa carrera intensa entre el delantero de ellos y el cuatro nuestro. El salto al unísono, el giro en el aire, la voltereta elástica, el braceo amplio en busca del equilibrio... Bueno... Eso, eso es la danza...
El Soda procuraba estimular sus sentidos, pero sólo veía que los rivales se venían con todo, porfiados, y que la pelota no se alejaba del área defendida por De León.—Y escuche usted, escuche usted... —lo acicateó el viejo, curvando con una mano el pabellón de la misma oreja donde había tenido el auricular de la radio y entusiasmado tal vez al encontrar, por fin, un interlocutor válido—... la percusión grave de la pelota cuando bota contra el piso, el chasquido de la suela de los botines sobre el césped, el fuelle quedo de la respiración agitada, el coro desparejo de los gritos, las órdenes, los alertas, los insultos de los muchachos y el pitazo agudo del referí... Bueno... Eso, eso es la música...
El Soda aprobó con la cabeza. Los muchachos no iban a creerle cuando él les contara aquella charla insólita con el viejo, luego del partido, si es que les quedaba algo de ánimo, porque la derrota se cernía sobre ellos como un ave oscura e implacable.
—Y vea usted a ese delantero... —señaló ahora el viejo, casi metiéndose en la cancha, algo más alterado—... ese delantero de ellos que se revuelca por el suelo como si lo hubiese picado una tarántula, mesándose exageradamente los cabellos, distorsionando el rostro, bramando falsamente de dolor, reclamando histriónicamente justicia... Bueno... Eso, eso es el teatro.
El Soda se tomó la cabeza.—¿Qué cobró? —balbuceó indignado.—¿Cobró penal? —abrió los ojos el viejo, incrédulo.Dio un paso al frente, metiéndose apenas en la cancha—. ¿
Qué cobrás? —gritó después, desaforado—. ¿Qué cobrás, referí y la reputísima madre que te parió?
El Soda lo miró atónito. Ante el grito del viejo parecía haberse olvidado repentinamente del penal injusto, de la derrota inminente y del mismo calor. El viejo estaba lívido mirando al área, pero enseguida se volvió hacia el Soda tratando de recomponerse, algo confuso, incómodo.
—...¿Y eso? —se atrevió a preguntarle el Soda, señalándolo.
—Y eso... —vaciló el viejo, tocándose levemente la gorra—...Eso es el fútbol.
Abrazo de gol ! ! !

La Gazzetta Psicologica Nº VIII "El devenir de una des-ilusión"

Editorial

Luego de un fin de semana signado por la fatiga física, he decidido tomarme un tiempo para tramitar y analizar los aspectos en los que fallamos, y así, dejamos pasar una gran oportunidad. Esa oportunidad era la de entrar en el reclasificatorio, y no salir novenos, dejando solamente por debajo nuestro a los odontólogos. Alguien me dirá que ese tiempo fue muy largo, puede ser, pero necesitaba tramitar la angustia generada por haber quedado fuera del torneo por motivos que exceden lo estrictamente futbolístico. Recuerdo el anterior numero de la Gazzetta, y la desilusión es todavía más grande. Después de semejante triunfo, después de dejar en la puerta a arquitectura al borde de la humillación absoluta, las fallas de carácter representativo-organizacional condenan a Psico al noveno lugar y lo dejan sin ninguna chance de jugar por mas nada. Pero sabemos todos que un tropezón no es caída, que este es el primer torneo que juega este equipo, que hace tres meses estos muchachos ni se conocían, que no tienen cancha para entrenar y no sé cuantas falencias más; motivos todos que nos permiten augurar un buen futuro a este grupo siempre y cuando, no se desarme. Muchachos, a seguir por la senda del trabajo en busca de la mejora futbolística, organizativa, y de compromiso.


El devenir de una des-ilusión

Luego de la épica batalla librada bajo la tempestad en ciudad, luego del triunfo obtenido, después de humillar a los arquitectos en su casa, el cansancio se adueñó de los players. Y el jueves arrancaron las maniobras para tratar de postergar, sino los dos, aunque sea uno de los dos partidos seguidos programados por el señor Emilio Gutierrez. La cúpula organizadora se comunicó telefónicamente con él, y tras largas charlas (muy amenas por cierto) el muy considerado Gutierrez nos dijo: “no tengo más canchas, es imposible postergar un partido”, y nos condenó a jugar domingo y lunes, los dos partidos claves para la clasificación. Y aquí quisiera hacer hincapié en lo siguiente, de ganar ambos partidos, quienes cuasi necesariamente quedaban afuera del torneo eran los arquitectos –los dueños de casa- y a quien inmediatamente antes, Psico les había ganado. Entonces, el señor Gutierrez nos dijo con su dulce y melodiosa voz que no se postergaba ningún partido más. Entonces había que empezar a sacar la cuentita: Luquitas se iba a Mar Chiquita a pescar, Lucas a Rosario en busca de minas, Hernán tenía un compromiso impostergable con Atlanta, Facu estaba lesionado, y Javi rendía Psicopato; el panorama era negro. Por si todo esto fuera poco, el nuevo arquero no podía ir el domingo porque jugaba en otro lado. El rompecabezas planteaba un desafío grande para los Dts, demasiado grande. A último momento, Gastón confirmó que no podía jugar y ya era tarde para decirle a José que se apersonara por ciudad. El Dt oriental podía aportar una ficha para que así llegáramos a once piezas y presentáramos un “equipo completo”; aunque a ojo de buen cubero no es un equipo completo aquel que no tiene suplentes. Once justos, y muchos de ellos llevaban encima la fatiga muscular de haber jugado el martes bajo la lluvia en ciudad. Enfrente estaba Filosofía B, que también venía de jugar el martes bajo la lluvia, pero la sustancial diferencia radicaba en que ellos eran 16 jugadores y su técnico (un boludo importante). Al momento del pitazo inicial, Filo B puso a sus mejores once, y Psico debió conformarse con plantar en campo a sus únicos diez. Con la línea de fondo armada, con un medio recauchutado, y una delantera improvisada la dupla técnica paró a los diez en cancha. Esta diferencia numérica hizo que los de Puán se abalanzaran sobre el arco de los blanquigranas. El agua todavía se hacia sentir en la cancha, y a este factor hay que sumarle el largo del pasto que impedía el correcto rodar de la caprichosa. Estos factores junto con el nerviosismo de los jugadores provocaron varios errores en el fondo, y producto de un error en la salida, llegó el primer gol de Filo; pelota bollando en la salida, presión de los delanteros, error de la defensa, y uno a cero en contra. Ya a los doce minutos hizo su ingreso el desayunado Julián, para completar los once. Ya con el conjunto completo, Psico se fue animando cada vez más y así generó algunas situaciones de riesgo. La más importante fue el tiro libre de Banegas que se estrelló contra el larguero. Así se escurrieron los primeros cuarenta, y los de Independencia cada vez eran más dominadores. Ya en la segunda parte, la fatiga comenzaba a sentirse. De todas maneras los blanquigranas iban en busca del empate, y arremetían contra el arco de Filo B. En los pies de Julito (el delantero que aportó el central oriental) psico tuvo las más claras, pero se fueron rozando el poste. En los contragolpes de Filo, la figura de KALIBRE se acrecentaba debajo de los tres palos. Abajo, psico demostraba fiereza a los delanteros rivales, y arriba intentaba con ataques punzantes, pero nunca llegó a concretar lo que insinuó. Así se fueron los segundos cuarenta, y el marcador se mantuvo igual que a los diez del primero, uno a cero abajo. Un partido en el que claramente Psico mereció más, pero el deporte castiga los errores, castiga los errores cometidos dentro y fuera de la cancha, castiga al que llega tarde, castiga al que no llega a once; y psico no hizo ninguna de las dos cosas, ni llegó temprano, ni llegó a once. Para mi gusto, fue un precio un tanto elevado el que debieron pagar los gladiadores blanquigranas, pero el fútbol es así.

Ya con el cansancio y la frustración del partido pasado a cuestas, comenzaron los llamados en busca de confirmar presencias para el partido del lunes. Enfrente estaba exactas A, que venía de suspender su partido del día domingo. Sí, sí, así como lo leen, muchachos… ellos suspendieron su partido y a nosotros nos argumentaron: “no se suspende ningún partido más” – la diferencia entre unos y otros radica (según mi parecer) en la “banca” o la buena onda que se tenga con el señor Gutierrez -. Ahora bien, los ñoños del pabellón 2 llegaban descansados, relajados, y armados. Armados en el sentido técnico-táctico del término: llegaban con suplentes y sin ausencias. Claro, la diferencia entre unos y otros era abismal; los blanquigranas llegaban al match con dos partidos en menos de cinco días. Por si fuera poco, la cabeza de los de independencia estaba hecha pelota. Un fiel reflejo de esto último es la frase que tiró Kalibre “hoy vamos a perder como siempre”. Claro, un espíritu derrotista y un cuerpo fatigado por el exceso de práctica deportiva, redundan en un bajo rendimiento en campo. Esto fue lo que afectó a casi todo el equipo de Independencia. Esta vez estaba Gastón defendiendo la portería de Psico, y eso era un buen incentivo para los jugadores. Arriba contaban con los dos tanques, Halfón y Julito; y eso también motivaba a algunos. Pero parece ser que Freiría veía más allá de lo evidente, y supo que la derrota del lunes sería catastrófica. El comienzo del encuentro estuvo signado por el ataque constante de los exactos, y la defensa (como podian) de los Psi. La diferencia física cada vez se hacía más notable, parecían aletargados nuestros gladiadores. La kinesióloga nos había advertido acerca de los trabajos regenerativos: “si quieren jugar mañana mejor que hagan regenerativos”; pero no le hicimos caso, y las consecuencias saltaron a la vista. El nerviosismo se apoderó de los azulados gladiadores, y la defensa se mostraba dubitativa. Así fue que a los quince, llegó un tiro libre cerca del área, una barrera mal armada por el guardameta, y la pelota se coló en el arco Psi. Uno cero, y la sensación de que la cosa estaba difícil. Los incansables bochazos de “la radio” Gastón, no hacían sino cansar vanamente a Julito y a Hernán. En psico, no aparecía el juego asociado que siempre los caracterizó, y los pelotazos se hacían demasiado tentadores. Por su parte los exactos habían identificado el flanco por el cual atacar, se trataba del sector izquierdo de la defensa azul, ya que allí estaba Freiría con una contractura total de sus gemelos. Así fue que hicieron un surco por ese sector, y Banegas no lograba cubrir los huecos. Pruiti se solidarizaba y daba una mano, pero el manejo de pelota de los exactos era exacto. Tocaban y corrían, circulaban la pelota, y psico solo se cansaba más y más. En una gran jugada llegó el segundo, cuya definición pasó por debajo del cuerpo de Gastón. Dos a cero para los locales. Cada vez se complicaba más la cuestión. Psico no conseguía concretar las que generaba; de la mano de Mateo, Halfón y Julito generaban jugadas realmente peligrosas; ahora bien, no conseguían plasmar en el resultado, lo que generaban en la cancha. Así se fueron al descanso, dos cero abajo los de independencia. Lo de Freiría era más que evidente, casi no podía mantenerse en pie; y todos los muchachos ya mostraban indicios de fatiga. Salieron a la cancha dispuestos a darlo vuelta; y se mandaron con todo al ataque. Algunas jugadas se hilaron, y así generaron diversas chances de marcar el descuento. Para el recuerdo queda un centro del marine que pega en el travesaño, para que luego Julito y el uru no puedan mandar el cuero al fondo de la red. Hernán tuvo un par, Julio otro tanto, pero ninguno pudo concretar esas chances. La contracara de esto, eran los muchachos de Exactas, que llegaron con contragolpes, y concretaron. A los 25 del segundo, llegaría una buena jugada de los exactos, que finalizaría con un remate certero de un volante para decretar el tres a cero. Esto, sumado a la sensación de que la caprichosa no quería entrar en el arco de los locales, dejaba flotando en el aire un olor a partido liquidado. Por si esto fuera poco tres minutos más tarde, el oriental terminó de cerrar un partido tras cometer un PENALAZO que el numero 10 se encargó de cambiar por gol. Cuatro a cero, y c´est fini! Quedó tiempo para algunos intentos personales, pero ni siquiera esos salieron; Halfón elaboró una gran jugada personal, pero hizo una de más y no pudo llevar a buen puerto su gran intento individual. Ya faltando poco y con psico completamente desordenado y desbordado, llegó el quinto. El pitazo del árbitro puso fin al calvario sufrido por los jugadores de Psi; quedaba en nuestros gladiadores la fatiga muscular, el cansancio, y la triste sensación de que un sueño se escurría entre sus manos. El banco era pura decepción, cabezas bajas y mucha bronca. Esta vez no había querido entrar, se había generado fútbol, se había llevado peligro al área contraria, mas la caprichosa no quiso meterse dentro del arco de Exactas. Pero me temo que la bronca no era solo por eso, sino por saber que es imposible afrontar dos partidos seguidos en días corridos, y que sus rivales habían suspendido su partido del día anterior. Esa sensación de vejación me parece que estaba muy emparentada con la bronca que tenían estos muchachos.

Queda esa horrible sensación de robo, esa sensación de que nos metieron la mano en el bolsillo, esa sensación de que quien nos representa no pudo gestionar aunque sea la suspensión de uno de los dos partidos. A esto tenemos que sumarle la falta de compromiso de algunos integrantes del equipo, quienes se retiraron a disfrutar del fin de semana largo dejando de lado sus responsabilidades con respecto al conjunto Psi; y esto se agrava aún más siendo que habíamos generado esa chance de meternos por la ventana, dejando afuera a Arquitectura, y necesitábamos más que nunca estar todos juntos, actuar como un equipo. Lamentablemente algunos no lo entendieron así, antepusieron un fin de semana largo al compromiso con el equipo en las ultimas instancias del torneo. Para finalizar, queda también al descubierto la falta de organización que tenemos, no podemos llegar al día del partido sin arquero, o faltándonos un jugador. Es una fea sensación la que queda tras perder el partido en un escritorio, y no en una cancha. La organización es fundamental, y el compromiso, también… y el deporte, premia el compromiso y premia a los que se organizan, a aquellos que van un rato antes.
Ahora bien, no son todos debe en las cuentas. Esta primera experiencia nos deja varias cosas positivas, como ser el grupo todo, como ser los asados, como ser la indescriptible sensación del triunfo conseguido ante Arquitectura, etc. Rescato de este torneo en primer lugar el hecho de habernos constituido como equipo, y en segundo lugar la manera en que se ensambló todo el grupo (porque ya somos un grupo hecho y derecho, los lazos son realmente fuertes). Muchachos, hemos hecho algo histórico: armar un equipo de fútbol de hombres, en una facultad donde el 87% del alumnado es femenino; por si eso fuera poco, cuando todos pensaban que nos iban a hacer de a docenas, más de uno se llevó una sorpresa. Hemos recibido elogios de casi todos los wines, los mismos rivales nos auguran la mejor de las fortunas, todo esto que hemos conseguido… no es poco.
Ahora bien, aprovecho este medio para convocarlos a todos y cada uno de ustedes a seguir en esta difícil empresa que comenzamos allá por julio del corriente; en aquellas frías noches de invierno, cuando ni siquiera había luz en la cancha, y cuando ni siquiera nos conocíamos. No abandonemos el barco, esto sigue viejo!! Y si le metemos laburo, si conseguimos una cancha para entrenar una vez por semana, si vamos armando amistosos, si seguimos por la senda de los asados, y fundamentalmente, si no desarmamos este grupazo… lo mejor va a llegar solo. ABRAZO DE GOL!!


Como lo vi -- (G.M.)

Psico se quedó con las manos vacías, gracias a la falta de organización, y a la poca o nula influencia de su dirigencia en la organización del torneo. Señores, sepanlo: nos arrancaron de las manos, el sueño que teníamos. Estoy profundamente convencido de que si se jugaban en días distintos, llegábamos al reclasificatorio. De todas maneras, es parte del derecho de piso que debimos pagar por ser los nuevos del torneo. Pero este grupo tiene unos huevos bien pero bien grandes, y va a seguir dando pelea; porque recién se está formando, porque todavía tiene mucho, pero mucho más para dar, y porque no va a bajar los brazos así nomás. Señores, en este ultimo numero quisiera sacarme mi sombrero ante este grupo de heroes, que han luchado contra todo para armar esto; para armar el primer equipo de psicología de la historia!! Sí, sí… ustedes fueron quienes se encargaron de mandar los mails, de contactarse unos con otros, y buscando la cancha, muchos conociendo el complejo deportivo por vez primera, se juntaron en el extremo de la capital. Señores, tomen conciencia de la dimensión de lo que han conseguido, y cuanto tiempo ha tardado la fucking facultad en darnos este espacio que tanto reclamamos; aunque a decir verdad, nadie nos lo dio, lo tomamos por asalto. De manera que no tiremos todo lo hecho hasta aquí por la borda, sigamos poniendole energía a este proyecto, a esta realidad… y sí, algunos se irán, pero ojalá que quede la gran mayoría de la línea fundadora, y que sigamos caminando todos juntos por la senda del interfacultades. Mis amigos, este giornalista mascherato se despide de ustedes por el resto del año, no sin antes prometer volver, y seguir -tan apasionadamente como siempre- la próxima campaña de nuestro REPRESENTATIVO DE LA FACULTAD DE PSICOLOGIA. Salut mes amis!! Je vous embrassé bien fort!! Au revoir!!

miércoles, 10 de octubre de 2007

La Gazzetta Psicologica Nº VII "La Psicoliada"

“Canta, Oh diosa, la cólera del Psicólogo Argentino, cólera funesta que desató infinitos males sobre los arquitectos.”
Así empieza esta reedición de la Gazzetta que -por hoy- mutará su nombre a Psicolíada –merced a la épica victoria conseguida ante los arquitectos-

Cuentanos, Musa, la historia de un grupo de hombres de muchos senderos
Que anduvieron errantes muy mucho tiempo,
Que vieron muchos años el interfacultades desde afuera
Y que con esfuerzo armar un equipo consiguieron.
Mas ellos mismos, fueron quienes construyeron
Ladrillo a ladrillo este presente de sueños.

Diosa, hija de Zeus, también a nosotros,
Cuéntanos algún pasaje de estos sucesos.

¡¡Así es señores!! En una noche lluviosa, con una cancha cuasi imposible, y con una actitud única, una motivación impresionante, así han disputado nuestros psicólogos el partido más emocionante de la corta historia de Psicología en este campeonato. Durante toda la jornada sobrevolaba una duda que carcomía las entrañas de nuestro equipo “¿se jugará?”. Y entre ellos mismos se fue develando la cuestión “llamé y me dijeron que sí”, “¿con esta lluvia? ¿Estas seguro?”, “Si sigue así, seguro se juega”, “Se suspende en cancha”, “No importa, vamos igual” fueron algunas de las frases que se escucharon en los celulares, que se vieron en los mensajes de texto, y que se leyeron en el chat. Dicho y hecho, los muchachos se juntaron -temprano esta vez- en el complejo deportivo de ciudad universitaria. Al pasar por el bar, las camareras y amigas de los gladiadores les batieron la posta “me dijeron los de Arquitectura que hoy se los van a coger”. Es cierto, la frase fue un tanto vulgar, pero en el ambiente del fútbol sabemos que no abundan los buenos modos, ni las palabras refinadas. Este comentario no hizo sino avivar el fuego interior de los psi e incrementar las ganas de pisarle la cabeza a los arquitectos. De a poco iban llegando los gladiadores, pero ya había algo especial en este match, por segunda vez iban a contar con un arquero de profesión; se trataba del señor Gastón, un amigo del uruguayo. Los minutos iban pasando, las luces del estadio ya estaban encendidas, y ahí estaban nuestros leones –media hora antes- entrenando al arquero, haciendo movimientos precompetitivos, y esperando al siempre retrasado Luchinho. Los equipos se iban completando de uno y otro lado, y el árbitro llamaba a los capitanes al sorteo. Con tacto, Juan consiguió que el árbitro nos diera unos minutos más mientras esperábamos ansiosamente al central. En ese ínterin el único DT presente se encargó de la charla técnica, e hizo especial hincapié en el aspecto emocional, “vamos a meter con todo, mucha marca, mucho quite, vamos a matarnos en la cancha” exclamó el central oriental. Luchito seguía sin aparecer, la cosa se hizo insostenible, y el árbitro dio el pitazo inicial sin que psico completara los once titulares.
Psico salio a la cancha con la siguiente alineación: Gastón en el arco, Nasif, Menéndez, Limone (llegó cuatro minutos después de comenzado el encuentro), García; Banegas, Rodríguez, Pruiti, Freiría; Halfón y Sztejfman. La cancha estaba muy mojada, ya de por si es una cancha pesada, pero con la lluvia y los charcos, comía piernas como loca. A este factor hay que sumarle el agua que se acumulaba en las botas de nuestros titanes, que a cada paso sumaban 120 gramos. El partido se planteó como un clásico, los dos sabían que se la jugaban en este match. Arquitectura venía de una triunfo frente al CBC, y Psico venía cabizbajo tras la derrota 0-6 frente al puntero. Lo que se debatía en este encuentro era quien era el último que entraba en el reclasificatorio, pero arquitectura corría con cierta ventaja, ya que tenía un punto más, y todavía le resta jugar contra odontología. Pero este era el partido clave, los dos lo habían entendido así; y el clima de finalísima se percibía en el aire. Ya lo habían calentado ellos en el bar cuando mandaron esa frase tan vulgar, guaranga y provocativa a través de las meseras. Varias bajas en el conjunto de Independencia dejaban a los dts y al equipo todo sin opción de cambio durante todo el encuentro. Aquellos jugadores a los que no les daba el físico para aguantar los ochenta, esta vez tendrían que aguantar; aquellos que no estaban acostumbrados a estar desde el minuto cero, esta vez deberían estarlo; aquellos que no estaban dispuestos a ir al piso, esta vez deberían hacerlo; aquellos que no estaban acostumbrados a correr cuando las piernas no dan más, esta vez deberían tirarse. ¡¡Y vaya si lo hicieron!! El partido se planteo cerrado, se preveían muchos errores debido al estado del campo, y al estado emocional de los jugadores. Entonces Psico apostó a eso, a cuidar lo suyo, y -sabiendo que no se podía desarrollar el juego al que nos tiene acostumbrados- trató de armarse bien en el fondo, y salir de contra cuando podía. Gastón aportó seguridad en el arco, y eso se transmitió a la defensa. El partido estuvo trabado en el medio, con mucha pierna fuerte, mucho roce, y un poco de fútbol. Arquitectura se hacia con la pelota, pero no conseguía profundizar sus ataques debido a la excelente labor que realizaban todos nuestros jugadores, presionando arriba y en el medio, y defendiendo en la ultima línea. Obviamente, el encuentro estuvo plagado de errores, producto del estado del campo de juego. De todas formas, los blanquigranas consiguieron armar algunas jugadas, triangulando la pelota. Los de arriba buscaban conectarse entre sí cuando tenían la pelota, y a su vez bajaban a dar una mano en la marca, y a buscar el cuero. Pero a los quince minutos, Hernán sintió una molestia en su pierna izquierda y el panorama para los de Independencia no era el óptimo. Mientras tanto, en el medio los muchachos mordían cuanto tobillo pasaba cerca, y abajo la vehemencia era el denominador común. Así fue que sobre los treinta del primero los arquitectos cometieron una falta a tres metros del círculo central; Banegas tomó la pelota y la mandó directo al área. Pelota mojada, rosca difícil, y presión de los delanteros fue un combo demasiado fuerte para el guardameta LeCorbussiano que no pudo contener el remate, dio rebote y se la dejó en bandeja al pichichi Psicológico Halfón, que en una pierna, la mando al fondo de las mallas. Uno a cero, y las caras de los arquitectos reflejaban la perplejidad que los invadía; ¡no podían creer estar perdiendo ante psicología! Los nervios comenzaban a apoderarse de ellos, y psico por un momento se contagió. Gastón desde el fondo no paraba de hablar ni un segundo, y eso ponía nerviosos a algunos jugadores. Las pocas jugadas que pudieron generar los arquitectos fueron contenidas por el nuevo guardameta sin ningún problema. Así se escurrieron los primeros cuarenta, y los blanquigranas se fueron a los vestuarios uno a cero arriba.
La llegada al banco fue letal, Halfón no podía más con su pierna, y los gestos de dolor en su rostro eran indisimulables. Las caras de cansancio eran muchas, pero la voluntad mueve montañas, y estos muchachos tenían una voluntad bárbara. Así fue que en la charla del entretiempo se tocó mucho el tema posicional (debido a las lesiones y el cansancio) y se hizo nuevamente hincapié en dejar todo en la cancha, y jugar con la desesperación del rival. Y así salieron a la cancha.
Los segundos cuarenta fueron tal cual lo pensaron los muchachos, arquitectura se venía con todo, pero sin fútbol… pero si vamos a comprar voluntad con voluntad, sepan disculparme, pero lo de psicología no tiene parangón. Estos once guerreros, estos once titanes, estos once gladiadores, estos once leones, pusieron todo lo que tenían (y lo que no también) en cada una de las pelotas que disputaron. Todos y cada uno de ellos dejó todo por defender a muerte esa ventaja. Pero el partido no terminaba ahí. Como les dije antes, los amarillos se venían con todo lo que tenían, pero era muy difícil jugar en esa cancha; por el estado del piso, y por los once leones que había enfrente. Entonces arquitectura con voluntad había logrado complicar la salida de psico. A los siete minutos de la segunda parte, García comenzó a renguear, y su cara me dijo todo en un segundo: “no doy más!” Entonces Freiría pasó a ocupar la posición de tres, y García pasó al medio. Pero no vaya a creer, mi querido lector, que en el medio no se corría; no cometa el error de pensar que allí se estaba más tranquilo, nada de eso señores. Javo metió y mordió todo lo que pudo, y un poco más; tal como lo hicieron todos sus compañeros. El cansancio avanzaba, y los locales habían metido cuatro cambios, sí señores! Sus camisetas estaban secas, sus medias pulcras, y sus espaldas no estaban empapadas con esa mezcla de sudor, caucho, y agua que tenían nuestros players. Y ellos están ahí aguantando los trapos, resistiendo cada una de las envestidas de los amarillos, firmes, con el pecho erguido, con cansancio sí, pero con una convicción total de que ese partido no lo perdían. El área que ocupara Gastón en el segundo tiempo era la más fea de las dos; había -a la salida de la misma- un charco gigante donde navegaban el oriental y Luchinho, y donde no se podía joder con la pelota (tal como diría Serrat). Y como no se podía jugar la sacaban, y arriba Luquitas corría y corría, de una lado al otro. Con correr de las agujas los nervios en el rival se acrecentaban, el cansancio en los nuestros también crecía, y Gastón desde el arco ya le agarraba la vuelta a la pelota y podía levantarla como para que Luquitas arriba se arregle. Pero Hernán no podía ayudarlo mucho, en cada pique el dolor parecía inmovilizarle su pierna izquierda y la ilusión de la contra se desvanecía. Otro que ayudaba en ataque era el Marine Banegas, con sus incansables corridas, pero ya no había tanta pierna como para dar una mano arriba. En la mitad de la cancha, Juan y Porno se mataban marcando y yendo al piso en cada oportunidad; psico estaba decidido a aguantarlo.
A eso de los veinticinco del segundo sale un pelotazo hacia mitad de cancha, y contra la línea izquierda del ataque psicológico la recibe Halfón, y no me preguntes con qué fuerza, con qué empuje, ni sé qué pasó con el dolor, pero el tipo se da vuelta y empieza a correr como si nada pasara y encara. Y le tiran encima estructuras uno, y el tipo con Le Sinthome lo gambetea y sigue; y lo cierran con diseño tres, y él pisa para adentro con Tótem y tabú y los deja pagando, y ya lleva recorridos como cuarenta metros y está pisando el área; lo acompañan El magico -sacándole alguna marca de encima- y Luquitas, que corrieron más de cuarenta y cinco metros para que Hernán tenga opciones de pase; y después de semejante corrida, y después de haber resuelto unos cuantos problemas en el camino, con toda su generosidad levanta la cabeza y lo ve a su compañero, que corrió a auxiliarlo, que fue hasta el área rival para que no tuviera que hacer todo él, para demostrarle que este es un equipo solidario, y el tipo le pone el pase milimétrico el punto del penal. Luquitas la para y se toma dos segundos para que, si algún arquitecto estaba distraído tenga tiempo de rotar la cabeza y ver cómo once leones venidos desde Independencia y Urquiza les hacen el segundo gol y los condenan a la derrota. Pase a la red de Luquitas, y esos quince Gladiadores, esos quince leones se funden en un abrazo fraternal e interminable; sí hermano, dije quince, y sí querés tratame de esquizoide, diagnosticame con el DSM IV o con el CIE 10, pero te juro que yo los vi: estaban en medio del tumulto de casacas blanquigranas, la número cinco del Conde, la seis de Mateo, y la siete de Facu.
Perplejos ellos, con sus camisetas secas, no podían dar crédito a lo que sus retinas registraban; psicología no sólo les ganaba, sino que les había metido dos papas. Sí, esos que no tienen organización, esos que se tuvieron que pagar de su bolsillo los pantalones y las medias, esos que no tienen cancha para entrenar, esos que tienen todas esas carencias pero que al mismo tiempo – y sepan disculparme por el término que he de emplear- tienen unos huevos grandes como ciudad universitaria, y van hasta allá y los dejan en ridículo enfrente de su propia facultad.
Aún restaban quince minutos, pero la inyección de adrenalina que produjo ese gol hizo que las dolencias fueran dejadas de lado, y todos siguieran corriendo y metiendo hasta el último minuto. Pero también esa inyección produjo desorden en el fondo, y en un ataque de los psi se produjo un desprendimiento por el lateral izquierdo dejando un hueco que los amarillos aprovecharon en la contra y pusieron el dos uno. Los últimos diez minutos fue más de lo mismo, arquitectura yendo para adelante sin ideas, y psico aguantando con mucho pero mucho huevo en todas las zonas del campo. El árbitro adicionó tres más, y prolongó así la vana ilusión de los de ciudad de poder –aunque sea- conseguir un empate. Pero los blanquigrana dejaron alma y vida en la cancha y en el agua, para llevarse no sólo los tres puntos, sino también la satisfacción de callar a los que hablan de más. El árbitro señaló el centro del campo, y un grito resonó hasta en los rincones más recónditos de ciudad universitaria: “¡¡¡VAMOS PSICO CARAJOOOO!!!”, para que luego todos se fundan nuevamente en ese abrazo fraternal festejando la segunda victoria del representativo de psicología en la historia!


Il Tabellino:

1- Gastón (9) En su debut, el goalkeeper tuvo un gran desempeño. Aunque debería moderar un poco la radio, sirvió para ordenar la defensa. La potencia de su pierna fue fundamental a la hora de salir desde abajo.
2- Menéndez (8) Metió y marcó con todo abajo. Se demoró en algunas, pero dejó todo en cada pelota. Ordenó la defensa y demostró la dureza de la defensa de psico al nueve y –en especial- al siete rival.
3- García (8) Marcó, corrió, metió y pegó. Cuando tuvo alguna oportunidad se animó a jugar con la pelota al piso. A pesar de su lesión, siguió en la cancha combatiendo hasta el último minuto.
4- Nasif (9) Paridazo del turco. Se animó a ir en algunas, pero se destacó fundamentalmente en defensa. Mordió, cortó, pegó, e hizo sentir el rigor de esta durísima defensa a los delanteros rivales.
5- Rodríguez –Porno- (10) Una gran sorpresa. Pensé que no iba a aguantar los ochenta, pero no solo que los aguantó, sino cómo los aguantó. Hasta el último minuto corrió todas, se tiró al piso, trabó, y jugó. Estuvo en todos lados, sinceramente un partidazo.
6- Luchinho (8) Mordió en todos lados, y con el oriental su turnaron para enfermar a los delanteros rivales. Por si fuera poco, en más de una jugada se fue al ataque en busca de sacar la presión del fondo. Eso sí, nos dejó en claro a todos que su faceta actoral no está nada explorada.
7- Freiría (8) Al principio estuvo un poco desordenado, pero luego entro en el rol de lateral por izquierda, para recalar –por ultimo- en la posición de numero tres. Como todos mordió, trabó, y luchó todas y cada una de las pelotas.
8- Banegas (8) Por el lateral fue una máquina de ida y vuelta. El prime gol nace de sus pies, y con su velocidad inquietó muchisimo a los arquitectos. Se rompió el lomo dando una mano en defensa, y luchó todas, hasta que tuvo que cambiar su posición producto del dolor que experimentaba en sus dos piernas.
9- Halfón (9) Se lesionó a los quince y el dolor era evidente, pero sabía que no podía dejar el campo. Metió el primero, y a pesar de todo siguió dando una mano en defensa, y corriendo todas arriba. Cuando entró en el segundo, tuve miedo que la lesión se agrave. Pero él sabía que no podía dejar al equipo con uno menos, y se paró adelante igual. Corrió algunas, pero hizo la GRAN corrida del partido, y en sus pies se gestó el segundo gol de la épica victoria. Tiene un sentido del equipo tan opuesto al que tuviera el otrora compañero de delantera Rafaldi, que después de semejante corrida cedió el balón a Luquitas que estaba mejor perfilado y así se consiguió el segundo gol. Sin dudas un GRAN PARTIDO del Pichichi.
10- Pruiti (10) En este partido demostró que no sólo sabe con la pelota, sino que también sabe meter hasta el ultimo minuto. Un compromiso único con la marca, desde el minuto cero estuvo ayudando en el aspecto defensivo, marcó, se tiró al piso, y corrió más que nunca. Por si fuera poco, ayudó en el aspecto ofensivo como cuando muy generosamente acompañó la corrida de Hernán arrastrando la marca. Para terminar de cerrar un parido brillante nos dejó algunos cañitos dignos de “El firulete” por la mitad de cancha. Chapeaux, mon ami!!
11- Stejfman (8) Un muy buen partido de Luquitas. Siempre dio una mano arriba, la aguantó, la pidió, las corrió todas, y cuando la tuvo en los pies se animó. El segundo gol fue suyo, tras correr cuarenta y cinco metros para auxiliar a su compañero de dupla delantera. Sobre el final tuvo que cubrir la banda derecha debido a la lesión del Marine, y no tuvo problema en tomar responsabilidades defensivas.

Me van a tener que disculpar, pero esta vez no puedo sacarle la FIGURA de la cancha a TODO EL EQUIPO DE PSICOLOGIA. Los destacados fueron TODOS los integrantes del equipo, hasta aquellos que no estuvieron y que son parte de este proyecto.




Señores, estos muchachos están creando una mística; estos muchachos están construyendo un equipo que crece cada día más, un equipo con todas las letras, un equipo de caballeros generosos y solidarios con los compañeros, un equipo de amigos. Alguien dijo por allí, “este partido lo ganó el asado” y reflexionando caí en la cuenta de que es la frase más acertada; esta mística fue creada en los asados, en las charlas en la red, en las charlas post partido, en las salidas post asados, en esos lugares donde los vínculos se fueron afianzando y estrechando hasta formar este EQUIPO DE TITANES, DE 15 TITANES. ¡GRACIAS LEONES!


Como lo vi – GM (un artículo de opinión)

Vi un equipo que llegó temprano, que precalentó, que entendió este partido como una final, y que supo adaptarse a las malas condiciones de la cancha. Estos muchachos me demostraron que cuando no se puede jugar al fútbol, ellos saben poner lo que tienen que poner para ganar. Vi muchísimo sacrificio, mucha marca, mucho cuerpo, mucha vehemencia, muchas ganas de llevarse los tres puntos y darle de tomar por culo a los arquitectos. Once caballeros deslomándose por conseguir un objetivo común, todos pujando por lo mismo, metiendo hasta lo que no hay, corriendo cuando ya el físico dice “basta”, yendo al piso en cada pelota como si fuera la ultima, emocionan hasta al más insensible… y estos señores me emocionaron. Me emocionaron con su grupo, me emocionaron con su entrega, me emocionaron con su mística, me emocionaron con su humildad, y me emocionaron con su solidaridad. Quiero levantar mi copa por ustedes, FIERAS, LEONES, TITANES, GIGANTES, GENIOS, GALACTICOS, GLADIADORES, o simplemente el equipo más unido que vi e integré en muchísimo tiempo!! ¡¡SALUD!!
Abrazo de Gol ! ! !

martes, 9 de octubre de 2007

Gazzetta Psicologica Nº VI "Un altra Illusione"

Llegaban primeros, invictos con pocos goles en contra, con una gran cantidad de goles a favor, y con toda una organización que respalda el desempeño deportivo de estos muchachos. Y en la vereda de enfrente, con unas apretadas casacas, con improvisaciones en la portería, sin hinchada, con técnicos en la cancha, sin una organización que los respalde, llegaban nuestros gladiadores, vestidos con su indumentaria blanquigrana. Claro, la diferencia era evidente, si hasta un viejito en la platea me desayunó: “¡pibe, estos son una máquina, hoy nos llevamos la canasta llena para independencia!” Efectivamente, la diferencia entre unos y otros era evidente hasta al ojo mas simplista de todos. Los papeles, indicaban a Económicas A (lider absoluto de la zona) como el gran favorito a llevarse el encuentro.
Llegué y los vi entrenando, y recordé lo que había ocurrido el pasado domingo. Esta vez ellos vestían un amarillo furioso, con franjas negras, shorts al tono, y medias flúo. Pero estaban calentando desde hacia rato, cuando asomaron los primeros gladiadores, abrumados por el sol, con gafas con filtro uv, y ojotas. La onda veraniega pega en psico, eso también es evidente. Y una vez más, los contratiempos, las desavenencias, la desorganización para tapar ese lugar tan pero tan importante que es el arco; el señor Borgatello acusó un choque del colectivo que lo transportaba, motivo por lo cual su llegada al campo de juego se retrasó un tiempo. Entonces, otra vez, hubo que improvisar en el arco, y ¿quien sino?, ¿quién hubo de calzarse los guantes heroica y estoicamente? Sí, sí, el GRAN KALIBRE. Tomó las investiduras de guardameta y salió al campo de juego, mirando a la lontanaza, pisando firme, con convicción, seguro de que este era su partido, vistiendo esa plateada casaca, con el pecho erguido, los guantes, era todo un guardameta. Pero algo le faltó a nuestro gran kalibre… lo de siempre, hablar! Le falto creérsela, le falto seguridad en lo que hacía, confianza en sí mismo. Ya con KALIBRE bajo los tres palos, la formación se completó de la siguiente manera: Nasif, Menéndez, Limone, García; Rodríguez, Schweitzer, Poleri, Pruiti, Halfón y González. Tras una pequeña charla motivadora, mientras el silbato apuraba, salieron ellos al campo de juego, con una mística que hacia recordar a los héroes del ochenta y seis. Los dts habían hecho hincapié en el compromiso a la hora de marcar, en mantener el orden, en no hacer tambalear la estructura, y fundamentalmente en “meter y meter”; y con esa idea se distribuyeron en el campo de juego. EL pito sonó, y el cuero se echó a rodar. Los amarillos rivales venían con todo, con una estructura absolutamente envidiable, un equipo sumamente prolijo, y sumamente trabajado; coordinaban a la perfección sus movimientos de conjunto, y los relevos estaban bien realizados en casi todas las circunstancias. Por si esto fuera poco, en los últimos 30 metros contaban con gente que manejaban con mucho criterio la pelotita. Pero de movida no le resultó fácil, intentaron por el medio y los costados, pero se encontraron con un equipo de psicología armado, fuerte, que sabía resistir los primeros embates del conjunto Económico. Ya había empezado los primeros roces entre los defensores blanquigranas, y los delanteros aurinegros. Incluso se habían planteado algunos duelos, como ser el del 10 rival con el Turco Nasif, o el que enfrentara al número 9 aurinegro con el central oriental. Pero nosotros sabemos que el fondo de psico es duro, es duro para correr y es duro para con los rivales. Recuerdo que en la primera edición de la gazzeta yo reclamaba más roce, que proponga más contacto físico, y estos muchachos realmente oyeron mi reclamo. Hoy en día creo que es de los equipos mas violentos del torneo, pero es parte de un aprendizaje de carácter cognitivo conductual que están implementando los muchachos psi. Lejos del laboratorio de Wundt y del diván de Sigmund, ellos se centran en el conductismo de Watson; recordando aquella experiencia del pequeño Albert, nuestros defensores buscan estudiar la reacción del miedo en los delanteros rivales. Para ello, aplican sistemáticamente maltrato físico (recurren a todo tipo de artimañas) de manera tal que lo delanteros rivales experimenten miedo al observar la combinación de colores blanco y granate. Con el correr de los partidos, vemos que el fondo de Independencia va consiguiendo fundar miedo en los delanteros rivales.
Pero la resistencia se desmoronó a las 15 minutos de la primera parte, cuando el diez rival desbordó por la derecha, a la carrera sacó un centro perfecto, y elevándose tres cabezas por encima de sus marcadores, el numero 8, le dio un pase de cabeza a la red. Uno a cero y a cobrar, el festejo sonó a desahogo, a tranquilidad, evidentemente psico por un momento puso tenso al puntero. Pero después del gol llegarían siete minutos de juego para los blanquigranas, se soltaron, e hicieron circular la pelota, generando así la sensación de que aún la cosa no estaba cerrada. Luego llegaría un error en la salida, la presión rival sobre Limone, y la definición impecable ante la salida de Kalibre para decretar el dos cero. Luego llegaría un pelotazo cruzado, y un error defensivo compartido entre el guardameta y el dos de independencia, dejó al nueve aurinegro con la pelota dominada y el arco a su merced. Tres cero, y la sensación de que esto estaba terminado. La presión rival era constante (K) y eso generaba errores en la salida. Desde la línea de cal, el técnico de los ecoñoños daba indicaciones constantes “siempre dos opciones de pase”, “no los dejemos respirar”, “metete en el partido”, y también fastidiaba a nuestros gladiadores. Minutos más tarde llegaría el cuarto gol, y el árbitro marcaría el centro del campo para finalizar los primeros cuarenta.
Este era un partido en los papeles perdido, así que no había mucho por qué preocuparse, sólo había que ocuparse de jugar al fútbol. Como psico sabe, con la pelota al pie, sin bartolearla, con la cabeza levantada, a un toque, pasando por los costados, mostrándose en el medio, y fundamentalmente, animándose. Así fue que salieron al campo de juego con el Marine Banegas en reemplazo de Halfón, con el demorado Borgatello en el arco –en lugar de Kalibre Freiría-, y con la idea de tocar la pelotita, de cuidarla un poco más. Pero el asedio económico no daba tregua, los aurinegros presionaban constantemente, y achicaban bien los espacios. De todas maneras, el conjunto de independencia fue creciendo con el correr de los minutos. Incluso en esa segunda etapa llego a mostrar destellos de buen fútbol. Mantuvo el orden (relativamente), y de a poco fue soltandose con la pelota en los pies. Así fue que en los pies del conde Schweitzer estuvo la jugada mas clara de los blanquigranas. La pelotita llegó al fondo prolijamente, en una gran triangulación, y el Magico Pruiti dejó pasar el centro atrás arrastrando la marca, para dejar solo al Conde quien remató desviado. Pero no fue la única clara que tuvo psico, la otra estuvo en los pies de Luquitas (quien había reemplazado al PornStar Rodríguez) quien tras recibir en cortada quedó de cara al arco, pero el arquero rival sacó el potente remate de Sztejfman. Tras un centro al área defendida por Borgatello, el rebote fue tomado por el numero cinco que remató al arco vacío. Cinco papas en contra, y la cosa seguía abierta. De a poco Borgatello iba encontrando la sintonía con el partido, y conociendo a sus compañeros de equipo. En un partido de roce, en un partido donde psico propuso el contacto, donde buscó aleccionar a sus rivales con el rigor físico que lo caracteriza, hubo (como tantas veces) una jugada brusca. El central Luchinho Carioca le mete pierna fuerte pero leal al el pelado aurinegro, y éste, desde el suelo, reacciona con una patada desmedida. Hasta aquí, todo normal, el tema es que la cadena se le zafó al gran Luchinho, y motivado por la omisión del árbitro, y la provocación del Dt rival, salió a hachar a cualquier camiseta amarilla que tocara el balón. Así fue que revoleo al primero que tocó la globa, y se armó la gresca. El resultado de este borbollón fue una tarjeta colorada para nuestro Dt. Ya con uno menos, hubo que reestructurar el equipo, y el conde pasó a cubrir la posición de zaguero central. Para la anécdota quedó el sexto gol; a la salida de un corner, la bola queda boyando en el área, el despeje del conde rebota en la espalda del 10 económico, y el cuero se cuela por sobre el cuerpo de Borgatello. Seis papas y a cobrar. Después quedó tiempo para alguna que otra pierna fuerte, y todo terminó cuando el pito indicó el medio del campo.
Fue seis cero en contra para nuestros gladiadores; pero a no confundirse, a priori uno diría que fue paseo, que hubo pesto, que se comieron un peludo bárbaro… nada más alejado de la realidad. Hay que reconocer que fueron superiores, pero no tanto como el resultado indica. Psico tuvo momentos de buen futbol ya no contra rivales que lo dejan jugar, ya no en aquellos amistosos contra rejuntes, ya no “jugando solos”, sino contra un equipo que está primero, contra un equipo que tiene cinco años de trabajo, contra un equipo que tiene toda una organización detrás, y esto es lo que torna más valiosos esos minutos de buen futbol. Los mismos rivales admitieron la sorpresa que dieron estos muchachos: “si siguen jugando al fubol así, les va a ir muy bien. Acá casi todos los equipos revolean la pelota, y nunca tratan de jugar por el piso” sentenció el numero diez de economicas. El reconocimiento rival, y la percepción propia de un progreso significativo marca a las claras los buenos derroteros por los que marcha este conjunto de 15 gladiadores. El problema es que da un paso por semana, mientras que los rivales avanzan de a dos o de a tres.


Il Tabellino.

1- Klibre (6) Una buena actuación del defensor devenido en Guardameta. Pero una vez más mostró que no se anima a gritar, y a orden la defensa.
2- Menéndez (6) Se encargó del número 9 rival, y salvo por el error del tercer gol, lo anuló. Buen partido para el oriental.
3- García (5) En ataque hizo un buen partido, pero se desordenó bastante en las tareas defensivas. Como siempre, se mostró como salida, pero no exhibió el criterio que lo caracteriza a la hora de decidir tocar o jugársela.
4- Nasif (6) Le costó ubicarse en la primera mitad, pero ya en la segunda parte, tomó mas confianza y se animó a jugar (le hizo caso a la publicidad del Bichi Fuertes). Mostró la fiereza y el rigor que lo caracteriza.
5- Schweitzer (6) Como siempre de lo más parejito. Bajó a buscar y desde allí distribuyó con criterio, un buen partido del conde.
6- Luchinho Carioca (5) Tuvo un tropezón en una salida, y de ahí vino el segundo. Estaba realizando un buen partido, se había recuperado del error, pero se le salió la cadena y se fue expulsado. Memos mal que no lo informaron!!
7- Poleri (5) No fue el Facu que todos conocemos. No pudo armar el eje por el lateral con su compañero de aventuras García. Se lo vio nervioso y dubitativo con el cuero en los pies. El vértigo que aporta en ataque es sumamente productivo siempre que tenga la mente fría; pero el domingo no se dio espacio para pensar claramente, y se desorganizó. De todas maneras hay que rescatar la entrega total, y el gesto que tuvo al pedir el cambio por un golpe.
8- Porno (6) Un buen partido del actor porno argentino (tal como Rocco en Italia). Se mostró por el lateral, y siempre buscó asociar juego. Constantemente pidió la pelota, aunque en defensa mostró algunas falencias.
9- Halfón (6) No le llegó mucho la pelota, pero supo moverse para generar el hueco. Además no fue egoísta en las pocas que tuvo y siempre eligió a un compañero mejor perfilado, en vez de optar por rematar él mismo.
10- Pruiti (6) Fue eje de los ataques, el comandante de las embestidas psi. Por si fuera poco, le sumó un compromiso total a la hora de marcar, y en más de una oportunidad terminó pisando su propia área siguiendo a un rival. Metió algunos pases incisivos, de esos que le duelen a la defensa rival y demostró que su apodo no es en vano, con un toque de magia dejó solo al conde de cara al arco.
11- Gonzalez (6) Es una tromba, literalmente “pasa por encima a los rivales”. Si bien es de carácter entrópico, su energía contagia y motiva al equipo. Metió, marcó, presionó, y jugó… uno de los mejores partidos de Mategol.
12- Borgatello (4) llegó tarde, y tardó en amoldarse al arco. Parece ser que se trata de un guardameta de cancha de cinco, razón por la cual adaptarse al arco gigante le va a costar un tiempo, naturalmente.
13- Luquitas (5) Tuvo en sus pies una chance única, y el remate fue bueno, pero la fortuna no estuvo de su lado. En cuanto al juego en sí, vemos que en la marca no apareció, y que a la hora de jugar no se tuvo confianza. Habrá que indagar si se trata de falta de confianza o de qué, pero es un jugador que tiene técnica y que con la pelota en los pies sabe… ahora bien, no rinde todo lo que puede. Hay que explotar al máximo su potencial técnico y futbolístico.
14- Banegas (6) Desequilibró, estuvo ubicado, y marcó una diferencia con su velocidad. Un buen partido del Marine, que llegó tarde pero se metió de lleno en el partido.

Claro, ustedes se preguntarán por la figura… podríamos dárselo a Mateo, podríamos dárselo al Mágico, quizás a K-libre, por qué no al Conde, pero no hubo nadie que se destacara por sobre el resto, de manera que la figura fue el equipo todo, que metió, marcó, jugó y puso todo ante un rival superior. Los buenos augurios de los rivales son constantes, ahora bien, para llevar a buen puerto esas promesas se necesita trabajo, mucho trabajo. Una vez más, nuestros gladiadores generaron otra ilusión: que se le puede ganar a los de abajo; jugando en este nivel, con esas ganas, ese entusiasmo, ese enchufe, y consiguiendo un arquero, la reclasificación es posible.


Como lo vi -- G.M. (un artículo de opinión)

Vi un equipo que fue superado, peor no vapuleado. Enfrente estaba uno de los grandes candidatos; pero estos muchachos no dejan de dar ventajas, regalan cosas por el camino; y si quieren algo serio no se puede regalar nada (y mucho menos ante rivales de esta talla). El puesto de arquero es fundamental, y nuestros titanes blanquigranas siempre dan ese changüí. Al margen de eso, el equipo que metió, mordió, comió, pisó y jugó. Este ultimo fue el paso más importante de todos, se animó a jugar frente a un equipo que no daba espacios, que no regalaba nada, que cuidaba la pelota y construía artesanalmente cada jugada. Eso es lo rescatable, el equipo esta caminando por el buen camino; avanza a paso lento, pero avanza. Quedan por delante tres finales – que se juegan en el lapso de una semana-, en las que habrá que dejar todo por ingresar en el grupo reclasificatorio. Hoy se juegan una parada importante frente a Arquitectura… SUERTE GLADIADORES!!!
Abrazo de Gol ! ! ! Vamos Psico Carajo ! ! !

jueves, 4 de octubre de 2007

Gazzetta Psicologica Nº V "Ni el tiro del final te va a salir"

Llegue al campo de juego y alli estaban ellos, entrenando, corriendo todos juntos alrededor del campo, saltando, coordinando movimientos, calentando, todo bajo la celosa mirada del director técnico. Eso que llegué temprano, faltaban 40 minutos para el comienzo del encuentro central entre Economicas B y Psicología. Desde chico, mame esta cuestión de verme los partidos de la reserva, buscando promesas en la cancha de defe, allá por el bajo belgrano, mientras esperaba que jugara la primera. Y este pasado domingo pensé lo mismo, voy a verme algun partidito antes. Pero me detuve en estos guerreros, vestidos de un azul tan oscuro que parecía negro, y los veía tan profesionales que hasta tuve miedo por mis muchachos de psico. Por algun momento me hicieron recordar aquella publicidad de nike, donde Eric Cantona, Ronaldo, Paolo Maldini, y Jorge Campos (entre otros) enfrentaban a las fuerzas del mal en el Coliseo Romano.
Ya faltando pocos minutos para el comienzo del encuentro, divisé las primeras casacas de color granate. “¿Donde está Borgatello??”, “¿Viene Luchito?”, fueron algunas de las voces que me alarmaron. Faltaba gente, pero tambien faltaba poco tiempo. Una vez más, nuestros gladiadores debían armar el equipo cinco minutos antes, y una vez más debían acomodar las piezas del rompecabezas para cubrir el arco. Los técnicos llegan con una idea en la cabeza, y de golpe, deben improvisar con las fichas que tienen, y todo se complica. Así fue, que sin arquero, y sin Lucho, el otro Dt esbozó una formación ante el ruego del arbitro porque los equipos entraran al campo. Del otro lado, con 17 jugadores a disposición, con hinchada, con gente que desde el lateral reclama y pide, con ayudantes de campo, estaban los muchachos de Ciencias Economicas B. Tras el saludo de los capitanes, el sorteo pertinente y la eleccion de saque o lado de la cancha, llegó Lucho. Esto hizo que la cosa fuera “un poco más normal”, y los once que pisaron el pasto fueron: Freiría, Nasif, Menéndez, Limone, García; Rodríguez, Schweitzer, Poleri, Pruiti; Halfón y Banegas. Casi se repite la formación del partido pasado, salvo por dos modificaciones, una obligada, y la otra… la otra también obligada. El viernes en un asado antológico (como todos los de Lucas “el magno”) el grupo todo decidió en Asamblea general constituyente, que el señor Samu Rafaldi, no debía participar del encuentro salvo un caso de fuerza mayor. Una vez más, se demuestra así una unidad de grupo, ya que se charló entre todos (los presentes, claro está) y se llegó por unanimidad a esa conclusión.
Con los once en el campo de juego, nuestros gladiadores blanquigranas, se prepararon para enfrentar a los azulados economicos. Pero claro, el hecho de llegar sobre la hora, y de no “meterse” en el partido desde el minuto cero tiene sus consecuencias naturales. Ya me lo había dicho un ex tecnico de la Selección Nacional, un tal Marcelo “no podemos regalar ni un minuto en desconcentraciones”; pero los blanquigranas parecen no aprender. Cierto es que el horario no ayuda, cierto es que no son profesionales, cierto es que son jóvenes y buscan diversión (es natural que así sea), pero también es cierto que quieren darle a este campeonato otro perfil, un poco mas competitivo. Y las condiciones potenciales están, es solo cuestión de darle una vueltita de rosca a la cosa. Lo más importante, lo fundamental, es el grupo humano; y estos muchachos ya lo tienen. Alguien acusará que hay que darle un poquito más de disciplina, un tinte más, solo un marco disciplinario contemplativo para explotar al máximo ese potencial que atesoran estos muchachos; y cuanta razón tendrá. Nuestros magnanimos gladiadores regalaron –literalmente- 15 valiosos minutos de juego; eso primeros quince minutos en que causalmente –y no casualmente- viró definitivamente el resultado del encuentro. “Las desconcentraciones se pagan caro, y yo quiero a los mios los cien minutos que dura el partido concentrados; ahí está el secreto” me dijo el gran Carlitos Bianchi en una entrevista cuando dirigía a Velez Sarfield. Efectivamente, las desconcentraciones se pagan carisimo, y carisimo fue el precio que tuviern que pagar nuestros gladiadores, que debieron cargar con la cruz del gol en contra durante el resto del partido. El medio no hacía pie, arriba no había peso, y abajo abundaron la desconcentraciones: ese fue el paorama de los primeros minutos. Y los ecoñoños, no iban a desaprovechar semejante regalo. Pelota en cortada, habilitacion dudosa, definición logica y a cobrar. Uno a cero abajo. Un resultado justo hasta ese momento, pero solo porque unos estaban “metidos” y los otros no; no habia una diferencia técnica que los separara. Mismo en esos quince minutos fatidicos, llegó una pelota en cortada (jugada casi identica a la del gol) pero esta vez el Pitón, se hizo dueño del area y atoró a la perfección al “copado” del tres, que no pudo más que estrellar su remate contra la cara de nuestro improvisado arquero. Con el correr de las agujas, el equipo se fue encontrando, y fue plasmando paulatinamente su identidad en la cancha. Esa idea de pelota por el piso, de toque corto y rápido que caracteriza al conjunto de Independencia. Pero claro, ya con el uno cero a cuestas. Por el lateral, se agigantaba la figura de Rodríguez, quien buscaba permanentemente asociarse con el velocísimo Banegas. El Conde Schweitzer se hacia dueño de la mitad, en base a su reconocida tecnica y su dominio del balón. Por el otro lado, Javi desde el fondo, y Facu desde el medio le imprimían vertigo al ataque Vino tinto. Halfón, bajaba incansablemente a buscar la pelota, pivoteaba y buscaba la devolución; pero ellos atrás tenían resortes en los pies, y reventaban cuanta pelota había dando vueltas. A este animo anti-futbol, le sumaban marcas férreas en el medio, un combo que psico no pudo quebrar durante los primeros cuarenta. Fue entonces cuando el árbitro marcó el centro de la cancha, y ambos equipos se fueron a los vestuarios.
Estos muchachos saben de percepciones, y sabían también que este era un partido para ganar, que estaban en condiciones de lograrlo, porque los azulados no eran tan buenos como parecían a priori, porque no se vislumbraba una diferencia técnica, porque los rivales eran mas ruido que nueces. Y entonces repitieron la formación, a la espera de torcer el rumbo. Pasados los diez minutos entraría el gran Mategol, en reemplazo del magno Rodríguez. El segundo tiempo mostró a un psico mejor plantado, bien parado, pero al que le costaba dominar la pelota. Llegó el tiempo de los cambios y Mateo se calzó la numero seis, bajando al medio a Banegas a su posición de clásico numero ocho. La pelota estaba dividida, ninguno de los dos podía adueñarse del cuero, y al mismo tiempo, ninguno podía profundizar lo suficiente. Con la entropía que introduce Mategol, el medio se hizo un lugar de transito rápido, y el efecto contagio hizo que Poleri se acelerara aún más. Por si esto fuera poco, nuestro pensador, ese que podía poner paños fríos en el medio, no estaba en su mejor día. Pruiti parecía no encontrar el rumbo con la pelota, y eso psico lo siente; pero más lo sienten Halfon y Gonzalez. Llegó entonces la modificacion e ingresó el señor Sztejfman. Minutos mas tarde llegaría una jugada desgraciada para los del conjunto de Independencia, una grosera falta que no vió el arbitro sobre el gran Banegas, a lo que nuestro gladiador respondió con una severa patada desde atrás; lo que dio motivos para que el arbitro le mostrara la tarjeta roja y le indicara el camino a los vestuarios. Ya con uno menos, la cosa se hizo más cuesta arriba para los de Independencia. Atrás la defensa se fue aplomando, y salvo algunos errores, no pasó mayores sobresaltos.

Cuando los vino tinto se hacían con la pelota, se permitían triangular y buscaban tocar al ras del suelo. Así fue que faltando diez para el cierre, llegó una gran jugada por la derecha. El incansable Halfon, bajaba a pivotear, y se encontraba allí con Banegas, Sztejfman, y Nasif; y allí se enarboló la mejor jugada del partido. Tocaron Halfon, Nasif, y Sztejfman, para que luego Halfón desbordara a dos marcadores, y echara el centro atrás para que a la carrera Gonzalez, sin dudarlo un instante rematara de cara al arco. Desde la popular se veía como el remate de mategol tenía unico destino de red; pero quiso el destino interponer la mano derecha del guardameta para evitar así el gol de los de Independencia. La espectacular volada del arquero, hizo aun más espectacular la jugada de los Psi; tras la atajada, el balón fue a estrellarse contra el travesaño y se perdió por linea de fondo. Fue el autentico “Gooouuhh”, aquel que inventara el programa televisivo “Palo y Palo” (una suerte de CQC futbolistico). El sofocón siguió con el centro, pero la fortuna no estuvo a favor de los Psi, y la bola terminó perdiéndose por línea de fondo. Después quedó tiempo para algún que otro intento de ambos lados, pero nada serio. Nuestros gladiadores se llevaron un uno a cero, contra otro de los “rivales directos”; y otra vez esa sensación de que se podria haber ganado de haber estado concentrados los ochenta minutos. Kart Marx, en El 18 brumario de Luis Bonaparte, toma una idea de Hegel, y sentencia “la historia se repite dos veces, una como tragedia, la otra como farsa”; aquí vemos que la historia se repite al igual que contra Filo. Otra vez Psico volvió a regalar minutos de juego, y en ambos casos los rivales capitalizaron. En la primera oportunidad, fue todo un tiempo; esta vez fueron 15 minutos… ojalá la próxima, ya no regalen más.

Il Tabellino:

1- Freiría (7) Sorprendió con sus dotes de arquero. Sacó lo que, sin dudas, hubiera sido el dos a cero. La faltó comunicarse más con sus compañeros, para lo cual es indispensable hablar!!
2- Menéndez L (5) Tardó un poco en meterse en el partido, pero después marcó el territorio, e impuso orden y respeto para psico.
3- García (5) Siempre se animó a salir jugando, aunque cometió algunos errores propios del intentar con la pelota al ras del suelo. A veces se engolosinaba demasiado y salía disparado hacia el arco rival, descuidando las espaldas.
4- Nasif (5) El tipo es una maquina de meter, y si no preguntenle al 7 de economicas que después de trabar con el, se fue hacia el otra lateral. Al margen de esto, cometió varios errores en la salida; pero cada vez se va acostumbrando más a su posición, y sabemos el potencial que tiene.
5- Schweitzer (6) Se hizo dueño del medio, jugó e hizo jugar; pero en más de una oportunidad se engolosinó demasiado con el cuero debajo de la suela.
6- Limone (6) También tardó en asentarse en el fondo, pero cuando lo hizo cortó y pasó. A veces sus proyecciones resultaron un poco irresponsables respecto del fondo, pero desde aquí reivindicamos al que apuesta. Por si fuera poco, sobre el final salió entre dos con elegancia: “BELLEZAA!!”
7- Poleri (5) Había arrancado bien, pero en el segundo tiempo se desordenó, y terminó por cualquier lado. Siempre intenta jugar, pero esta vez, su aliado de siempre, le falló. No consiguió asociarse con Pruiti, y esto se noto en el juego.
8- Rodríguez (6) Viene levantando en base al compromiso con la marca y a su juego de toque corto. Formo una coalición interesante por ese lateral junto con Nasif y Banegas. Las pidió todas, y siempre se mostró. Bien MAGNO!
9- Halfón (7) Si tuviera que definirlo con una palabra, diría generoso. El tipo se tira abajo cuando no llega, y da una mano en defensa y enarbola el ataque. Pivotea como pocos, la baja y se muestra, y se da vuelta y la pide y la corre; y eso contagia. Por si fuera poco, a la hora de definir, no tiene el arco como unica opción, sino que levanta la cabeza y asiste a los compañeros. Alguien dira que le llegaron pocas, pero no es solo con la pelota que se juega a este deporte, señores!
10- Pruiti (4) Tiene talento, pero alguien en la tribuna sentencio “Pruiti talento!!”, claro, ta-lento. Efectivamente, Pruiti estaba lento producto de la actividad nocturna propia del casamiento de un familiar muy cercano. Se lo notó confuso, y falto de coordinación (algo muy raro en él). Un mal partido puede tener cualquiera.
11- Banegas (6) Como dije anteriormente, formó la coalición del lateral derecho junto con Rodríguez y Nasif. Corrió incansablemente, se mostró, la pidió y desbordó como siempre. Tuvo una mala reacción ante una jugada puntual, y dejó al equipo con diez hombres… pero nada opaca su buena labor.
12- Gonzalez (6) “Ahhh si fuera un poco más ordenado!!” escuché decir a un viejito que observaba desde la popular. El gran mategol tiene ese problema, pero tambien tiene otras virtudes como esa energia que entrega desde el primer momento en que pisa el campo. Corre todas, va al piso, muerde tobillos, aplasta rivales, nada le importa; siempre va para adelante. En sus pies estuvo la jugada mas clara, y definió bien, lastima que el arquero se interpuso, y la pelota terminó en el travesaño.
13- Sztejfman (5) No consiguió conectarse del todo con el encuentro. Parece ser que la actividad fisica extradeportiva (siempre que no entendamos al sexo como un deporte) lo tiene exhausto. Así fue que no consiguió cambiar el aire, y pareció no estar a la altura de las circunstancias. De todas maneras, mostró lo que sabe con la pelotita; deberá trabajar más la parte fisica, o cambiar el aire antes de ingresar.



Como lo vi – GM (un articulo de opinión)

Vi un equipo que va creciendo en varios aspectos. Crece en grupo humano, y crece en identidad futbolistica. Pero no crece en el sentido de la responsabilidad, vuelve a regalar valiosisimos minutos de juego, y eso a la larga pesa. Recibió el gol en esos minutos de yapa que despilfarró antes de meterse en el partido. Después se encontró con un cerrojo en el area rival, y se hizo muy difícil entrar. Encima cuando tuvo la chance, el arquero con felinos reflejos sacó el bombazo de Gonzalez, ese tiro del final del que habla el titulo. Hay cosas que mejorar, pero se nota que hay equipo. Si se toman las cosas con un poco mas de seriedad (tampoco el extremo de sociales), sin dudas, van a llegar lejos.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Gazzettina -- piccola edizione intersettimanale






El Lunes en horas de la noche, y con una indisimulable sonrisa producto del triunfo logrado por el representativo de Psicología, los directivos de la institución presentaron ante la prensa a la nueva incorporación. Se trata del guardameta Ernesto Borgatello (la ficha tecnica estará disponible proximamente) proveniente de la serie A del futbol italiano. El evento se realizó en un conocido hotel de la zona céntrica, y contó con la presencia de la gestora del Deportivo (la srta Fedra), el representante máximo del departamento de presna y difusión (Sr. Nasif), y de la dupla técnica compuesta por Limone-Menéndez. El Dt Limone sentenció ' Es una alegría tenerlo en el plantel. De todas maneras, hay que ver como está, por eso lo llevaré de tour empezando por Coco y... veremos donde termina la noche. Quiero saber si se banca un estudio de mercado'. Todos coincidieron en que la llegada de Borgatello aporta una solución a un gran problema: el arco. 'No tengo dudas de sus cualidades, vimos varios videos, y lo seguiamos porque teniamos el dato de que estaba en psico. Hay que ensamblarlo al equipo, y tendremos que trabajar para lograr eso' declaró el otro Dt, Menéndez L. a un conocido matutino porteño. ENTRENAMIENTO Tras la abultada victoria del pasado domingo, el conjunto blanquigrana retomó los entrenamientos. Esta vez, ya contaba entre sus filas a la reciente incorporación: el arquero Ernesto Borgatello. Los jugadores realizaron trabajos fisicos durante la mañana, para luego realizar futbol en espacios reducidos.En las fotografías se puede ver el entusiasmo que hay en el equipo merced a los tres puntos obtenidos, asimismo se puede observar los trabajos diferenciados que ha realizado Borgatello a fin de ponerse a punto para este fin de semana 'Es un jugador fundamental, confiamos plenamente en sus capacidades tanto futboliticas como humanas' dijo en declaraciones exclusivas uno de los Dts.Por su parte, Halfón sostuvo 'tenemos que seguir trabajando como lo hicimos hasta ahora, y de seguir por esta senda, somos conscientes de que lograremos grandes cosas'. De esta manera dejó en claro que el exito no se le sube a la cabeza, a pesar de ser hoy por hoy el goleador del conjunto de Independencia.


Teniendo en cuenta que nuestros gladiadores han conseguido resultados decorosos contra los equipos que hoy pelean la punta del torneo, entendemos que el proximo partido será clave con vistas al futuro del Deportivo Psicologia. 'Sabemos que de meter los proximos dos partidos - se refiere al encuentro con Economicas B, y con Arquitectura- nos ganariamos el respeto de los rivales. No queremos ser la trolita del torneo, ya se lo demostramos a Odonto, y ahora vamos por Economicas B.' palabras del lateral derecho Eduardo 'Turco' Nasif, que denotan una clara convicción. En audio radial se escuchó a Pruiti afirmar 'la prensa habla de nosotros como una promesa, les vamos a demostrar que se equivocan: SOMOS UNA REALIDAD. Sé que no estamos para pelear arriba porque los resultados no nos acompañaron, pero este torneo vamos a hacerles ruido a los grandes. ¿Se creyeron que solo había minitas en Psico?'.
Las declaraciones del plantel son contundentes, PSICO ESTA PARA MAS. Solo resta plasmar todo esto en el resultado, pero por Independencia ya hay olor a 'algo más que una promesa'.
Prossima PARTITTA Domingo 30, 12 hs en la cancha 3: Psicología Vs Economicas B
Abrazo de Gol ! ! !










martes, 25 de septiembre de 2007

La Gazzetta Psicologica Nº IV "Historico Triunfo"

Sabido por todos es que estamos ante un hecho histórico. Por primera vez en la historia, se presenta un equipo de fútbol 11 representando a la Facultad de Psicología de la U.B.A. –la carrera acaba de cumplir recién 50 años- en el torneo interfacultades. Este equipo está compuesto por 17 gladiadores, aquellos que cagados de frío se reunieron allá por junio un sábado a las 18 hs en ciudad universitaria, aquellos que se jugaron un picado sin luz en la horripilantes canchitas de fútbol 5. Esos, que sábado tras sábado iban contra viento y marea a juntarse para armar un equipo, y buscaban darle a este grupo de voluntades, una entidad, buscaban formar un equipo. ¡Y claro, si de grupos se trata, qué mejor que 17 estudiantes y graduados de psicología! Y así fue que consiguieron, merced a la buena gestión de la novia de uno de los integrantes del plantel, entrar al interfacultades del corriente año. Luego, varios querrían sumarse al barco que solo unos pocos habían armado, y las solicitudes debieron ser rechazadas. El plantel estaba armado.
Llegó el momento de asignar la responsabilidad de la conducción táctica y técnica del conjunto, y se decidió por mayoría otorgarles el rotulo de “dt´s” a la dupla compuesta por Limone- Menéndez. Así fue, que con hidalguía debieron asumir ese difícil rol, que implica tomar decisiones que siempre dejan a alguien disconforme; pero siempre alguien las tiene que tomar. Y se armó entonces el grupo, con sus roles asignados, y no tardaron en llegar las camisetas, luego se encargaron de hacer los pantalones y medias, y así completaron la indumentaria reglamentaria. Por si todo esto fuera poco, algunos tomaron la iniciativa de empezar a apuntalar el grupo desde otras perspectivas, desde “otros enfoques”, y generaron una mística copera – que incluye asados y salidas a varios locales nocturnos -. Otros, con humildad, intentamos desde nuestro lugar aportarle esa “salsa” que tiene el fútbol, ese condimento especial que es este magazine deportivo. Claro está que es una opinión, claro está que no se puede ser objetivo (aunque uno hace lo posible para analizar friamente las cosas), claro está que hay que leerlo como un divertimento, claro está que lo que busca es sumar al grupo y nunca restar, claro está que la gran mayoría del plantel entiende esto y no necesita unas “instrucciones para leer la gazzeta” así como tampoco necesitan unas “instrucciones para subir una escalera” (salvando las diferencias entre los autores de uno y otro texto). Considero que todo el grupo entendió desde el comienzo que estas investiduras que tomo al momento de escribir, no buscan ocultarme entre las tinieblas, sino que son parte de un juego, que aporta emoción a la semana mientras se espera el partido siguiente, y sirve a modo de repaso y registro de lo que domingo tras domingo estamos escribiendo. Y aquí me gustaría hacer una aclaración que entiendo reviste particular importancia, y es que en todo momento se busca sumar al grupo; desde adentro, desde afuera, desde esta edición electrónica, desde la logística, desde el encargarse de hacer los cortos y las medias, desde el ir a buscar las casacas, desde el armado de los entrenamientos, desde la difusión de prensa, desde donde sea, pero siempre en pos del grupo; siempre con sinceridad, siempre con honestidad y con ganas de que lo que sobresalga sea el grupo y no las estrellitas. Cuando es un grupo el que tira para adelante, cuando las cosas se hacen conjuntamente, cuando todos pujan y empujan para que las cosas salgan bien, cuando todos pugnan por el bien común, es allí cuando los resultados vienen al encuentro del grupo y -claro está- la felicidad invade a todo el conjunto.




Los tiempos de edición, el apuro por salir a “copar la calle”, la voraz competencia, y demás obligan a nosotros (gli giornalisti) a escribir con cierta prontitud. Esta aclaración trata de funcionar a modo de disculpas por el olvido de nuestro gran Luquitas en la edición anterior. Vayan mis más sinceras disculpas, y sepa que es un jugador muy apreciado por quien le escribe… pero sepa también que estoy profundamente convencido (para no poner la frase Alfonsinista “estoy persuadido”) de que usted tiene mucho más fútbol para dar.


Cronaca della partita

“La victoria al psicólogocon sus alas brillantes cubrió,y azorado a su vista el odontólogocon infamia a la fuga se dio”


Como dijera en la primera edición, uno sueña con un día lindo, despejado, cancha llena, chicas alentando en la tribuna, y tres puntos en el bolso. Y, a decir verdad, podríamos decir que casi todo eso se dio el pasado domingo. Los que veíamos las cosas desde afuera, llegamos a la cancha sabiendo dos cosas, que nuestros gladiadores se jugaban una parada importante ya que eran favoritos, y que a su vez, debían demostrar por qué eran favoritos. Un fanático de odontología me dijo: “hoy vamos a ganar los primeros tres puntos del campeonato”, y claro, ellos entendían que este era el partido que demostraba quien era quien. Llegue al estadio temprano, me baje del 107 en la puerta de ciudad ya que el transito estaba cortado por el operativo policial, caminé junto con los fanáticos de psicología, y con ticket en mano, sortee los controles policiales. Ocupé mi lugar en la platea, y ya las populares estaban llenas. El día estaba despejado, quizás un poco fresco, pero cuando la pelota empieza a rodar, uno se olvida de todo y se concentra en lo que ocurre en la verde gramilla. Diez minutos antes del comienzo, me asomé por el túnel, y ahí los vi, estaban los 15 gladiadores, vestidos con la indumentaria oficial, esperando por la charla técnica. Parece ser que alguien advirtió la similitud que había entre las casacas de uno y otro equipo, y la decisión se sometió a sorteo. Y ese fue el único triunfo de odontología en toda la tarde, ellos vistieron su indumentaria oficial, y nuestros leones, debieron vestirse de amarillo para saltar al campo de juego. Luego de la charla técnica, siguió una entrada al campo de juego digna de un equipo de elite; tras el capitán (que vestía una coqueta cinta en su brazo) ingresaron los jugadores formando dos filas, al llegar al medio del terreno, todos saludaron al público que ya ovacionaba.
Las manos arriba de todo el plantel, agradecían la presencia masiva de público (ver fotografía adjunta) al tiempo que intimidaban al rival. FTL, la empresa que viste al conjunto colgó un cartel que rezaba, “Independencia no late, ARDE”.
La dupla técnica a cargo, decidió plantar en el campo los siguientes once: José en el arco, en el fondo, Nasif, Menéndez L., Limone, y García, en el medio Rodríguez, Schweitzer, Poleri, y Pruiti, y adelante Halfon y Rafaldi. Con estos en el campo, y sus respectivas casacas amarillas, el árbitro dio el pitazo inicial. Psico sabía que era el que debía demostrarle a su público que realmente no se trataba de una vana ilusión, que está para más, y que solamente le faltaba plasmar esto en el resultado. Fue por eso, que salió con una actitud agresiva en busca de la primera conquista. Y esta no tardo en llegar, fue de penal, y lo convirtió el experimentado delantero Halfon, quien definió al costado derecho del arquero mientras este se arrojaba contra el otro palo. El uno a cero desató el delirio del público local, que ansioso esperaba el gol. Pero atrás la cosa no estaba tan linda, Odonto presentaba tres movedizos delanteros, que ganaban las espaldas del los laterales, y complicaban a una defensa que no estaba ajustada en las marcas, esto repercutió en varios sobresaltos que debió aguantar el debutante José. Pero el segundo gol salió de una contra de psico, una vez más, el goleador demostró porqué lo llaman así, y mitad guapeando y mitad jugando se llevó la pelota desde mitad de cancha por el lateral derecho, y definió (con algún rebote) ante la salida del arquero. Dos a cero, y la cosa pintaba para goleada de los amarillos. El otro artillero que tiene el conjunto de Independencia, hacia de las suyas con los defensores rivales, y en una escapada por la izquierda, llegó un penalazo del arquero que él mismo se encargó de trocar por gol. Tres papas, y a cobrar. La gente ya estaba delirando en las tribunas, la algarabía se percibía en el ambiente. Pero no todo sería alegría para los dirigidos por Limone-Menéndez, la defensa hacía agua ante los embates de los rápidos delanteros odontólogos, y el descuento se hizo realidad. Luego, un centro atrás, y un preciso remate, hicieron estériles los intentos de José por retener el balón, y el resultado ya no parecía estar cerrado. Psico generaba jugadas de riesgo, como aquella en la que quedó Nasif mano a mano con el arquero - tras pase de Halfon-, y no supo definirlo. Algo similar ocurrió cuando fue Pruiti el que habilitara al 9 de psico, y este desperdiciara la oportunidad rematando al cuerpo del guardavalla. Por su parte, Samu tuvo una gran oportunidad, cuando gambeteo un penalazo que le cometiera el arquero y luego estrellara su remate en el palo; pero todos sabemos que si hay penal previo el arbitro debería haber retrotraído la jugada y sancionar el penal, pero no lo hizo. Con el tres a dos a favor de los amarillos nos fuimos al descanso.
En el vestuario se percibía un nerviosismo importante, los muchachos de psico veían que el partido podía llegar a escaparse si no cambiaban algunas cositas. En ese momento, fue cuando los Dt´s decidieron meter un cambio en la delantera, dispusieron la salida del Samu (a pesar de su buen desempeño) y la entrada de Mateo, quien ansioso alentaba desde afuera. El problema se suscitó en el momento en que Samu conoció el veredicto de la dirección técnica, y la protesta fue inminente. Demasiado airosa, es cierto, desubicada, también lo es, pero quizás guardara algo de razón; lo que Samu pedía era un poco más de tiempo, pero una vez más, equivocó la manera de dirigirse al grupo. Y en este punto quisiera detenerme, antes de proseguir el relato: según trascendidos, Mauro habría hablado, en el ínterin de todo esto, con la gente de odontología –aclaremos que les faltaba un jugador- y habría sentenciado: “ahora juego para ustedes”. Subrayo lo de trascendidos, pero entiendo que esta actitud es absolutamente negativa para con el grupo; y desde aquí invitamos al señor Samu a aclarar este malentendido –cosa que sinceramente espero que sea- y tambien a que deponga esta actitud negativa que está teniendo para con el grupo todo.
Lo cierto, es que con el tres a dos a favor de psico, con Mateo en la cancha en lugar de Halfon, los amarillos arrancaron los segundos cuarenta. Atrás las cosas no estaban del todo claras, algunos no terminaban de cerrar las posiciones, y el nerviosismo parecía apoderarse de todo. Así fue que pasados siete minutos de la segunda parte, quedó una pelota bollando en el área, y el 16 rival, la mando a guardar contra un palo; el estadio enmudeció. Nadie podía dar crédito a lo que veía: ¡Odontología había remontado un tres a cero! Ahora el desafío planteado era otro, ver como harían los Psi para manejar la desesperación y todo lo que generaba esta situación. El termino Resiliencia está muy en boga en el ámbito Psi, y estos 15 Gladiadores, sacaron a relucir toda la resiliencia que tenían, y transformaron este golpe anímico, en un potenciador de sus facultades futbolísticas. Pero la pelota no quería entrar, y Samu desperdició un centro atrás tras una bella jugada por la izquierda. Cuando las cosas no salían, fue el mismo Samu, quien abrió el camino; después de una combinación entre Poleri y Pruiti, le llegó la pelota, y tras trabar con un defensor, el balón tuvo destino de gol. Cuatro a tres para los Psi, y a festejar. En ese momento llegarían algunos cambios como ser el ingreso de Luquitas, y el de Mauro. Después solo quedaría tiempo para un aluvión de Offsides, y de goles también. Mauro con una media vuelta espectacular clavó un golazo; minutos más tarde llegaría otro del nuevamente ingresado Halfon; Mateo, tras pase del central oriental decretó el siete a tres. Ya el conjunto amarillo se lucía. En ese momento hizo su ingreso Alvaro Rafaldi, quien ocupó la posición que dejara el ovacionado Pruiti. Psico tocaba la pelota atrás, mostraba solidez defensiva, salía desde el fondo con elegancia, circulaba la pelota en el medio, y definía exquisitamente arriba; prueba de esto último fueron los goles de Luquitas quien hizo gatear al arquero de Odonto para sentenciar el octavo, y el ultimo de la cosecha Halfón, que cruzó un zurdazo letal ante la salida del número uno. Nueve a tres fue el resultado final, con momentos para el análisis, con mucho condimento, pero con la certeza de que estos muchachos están escribiendo la historia señores. El día 23 de septiembre de 2007 quedará grabado en nuestras retinas y en los anales de la historia como el día en que Psicología ganó sus primeros tres puntos. ¡Gracias HEROES!

Il tabellino
José (7) Cumplió con su labor, sacó mas de una y ocupó un puesto que siempre les resulta difícil de cubrir. Salud a josé
Menéndez L (6) Un poco dubitativo en el comienzo, pero luego se recompuso, demostró fiereza, y terminó mostrando su categoría en el fondo saliendo con estilo. Mejoró la imagen que nos había dejado en otras ocasiones.
Limone (6) Siempre sobrio, y fiel a su estilo, corta y pasa. Ese parece ser el lema del central carioca. Fue áspero cuando la ocasión lo ameritó, y salió con sutileza.
Nasif (6) Se perdió en los primeros minutos, pero luego se ordenó, y hasta llegó a pisar con peligro el área rival. Tuvo un mano a mano que desperdició. De a poco se fue soltando, y fue mostrandose como salida.
García (6) Tardó en coordinar la marca con su compañero de banda, y eso desarmó un poco la defensa. En todo momento se animó a jugar, y siempre intentó con la pelota por abajo.
Schweitzer (6) Siempre marcó, se mostró y cuando pudo jugó. Le faltó pisar un poco más el campo rival, y en algunas oportunidades se engolosinó demasiado con el balón.
Poleri (6) Le faltó coordinación con Javier en la marca, después demostró lo que sabe con la pelota al pie, y su visión del juego. Siempre con su animo aguerrido y con ganas de ir para adelante con la pelota en el piso.
Rodríguez (6) Claramente se evidencia una mejoría en el estado fisico, y con la pelota en su poder, sabe qué hacer. Cultor de un fútbol rápido, siempre buscó asociarse con sus compañeros y circular el balón.
Pruiti (6) parece que le han encontrado el lugar donde más gravita en la cancha, allí donde pensar hace la diferencia de sus pies salieron varias habilitaciones que dejaron a los delanteros mano a mano con el arquero rival. Asumió compromisos en el aspecto defensivo y bajó a marcar constantemente.
Halfon (9) la figura, por los cuatro goles, por su incansable generosidad, por su despliegue, y por su sacrificio. Dejó en claro por qué viste la nueve.
Rafaldi, M. (8) Corrió incansablemente, se mostró, y trató de jugar. Se guardó alguna que otra de más, pero “los goleadores son así Fabri!” Marcó dos, y le hicieron un penalazo que no se lo cobraron.
Gonzalez (6) Clavó un golazo, corrió todas, pero le faltó ser un poco más expeditivo a la hora de rematar –siempre un enganche o una duda de más-. Hay que revisar la cuestion del offside, Mategol!
Sztejfman (7) Revirtió la mala imagen que había dejado el partido pasado. Se soltó y se animó a gambetear como el sabe. Trianguló y siempre buscó a los compañeros. Por si eso fuera poco, clavó un golazo! ¡MAGICO, NENE!!
Freiria (6) Buscó siempre por el lateral, subió incansablemente, y se deslomó marcando. Metió uno de los goles más lindos, dominó con una, y en una baldoza sacó una mediavuelta espectacular clavandola en un ángulo. MAGIC PITON!
Rafaldi, A. (5) No se encontró en la posición. Parece que faltó estado fisico, no estaba metido en el partido, no hubo compromiso con la marca, y a la hora de jugar, no pudo dominar el balón. Tuvo una mala tarde, ya mejorará.



Cómo lo vi -- G.M. (un artículo de opinión)

Vi un equipo lleno de ilusiones, que por momentos parecían desvanecerse. Estuvo nervioso, impreciso, bartoleaba la pelota, hasta que encontró la vuelta. Después se fue asentando, se fue tranquilizando y terminó ganando con total autoridad. Si no hubiera sido por los offsides (contabilicé 8) la diferencia podría haber sido más abultada. Quedan por mejorar varias cosas, sobre todo en lo referente al grupo humano, y las relaciones interpersonales. A aquellos a quienes les molesta esta edición, vayan mis disculpas; para quienes las disfruten, va mi más esmerado empeño en seguir con esta rutina que (considero yo) le aporta a la semana ese gustito que solo una revista que hable de nosotros le puede dar. Aprovecho este medio para saludar a la reciente incorporación, el tan esperado guardameta: el señor Borgatello. Sin más que decir, los dejo… pero no sin antes, mandarles un fuerte abrazo de gol (nueve fueron esta vez), y mis felicitaciones GLADIADORES!! (a los 17)


martes, 11 de septiembre de 2007

La Gazzetta Psicologica Nº III "Una oportunidad desperdiciada."

Una vez mas, me desperté bien tempranito, y rumbié para los pagos de Ciudad Universitaria, con el objetivo de cubrir el partido que enfrentara a los prometedores muchachos de Psicología y a los no tan prometedores de Filosofía A. Llegué pasadas las once, y ya podía percibirse en el aire un ambiente de clásico. Un día caluroso, las hinchadas que iban llegando, los trapos que se colgaban, y (al parecer) una vieja rivalidad entre estos dos conjuntos. Aunque a decir verdad, no puede ser muy vieja, vale aclarar que este era el tercer partido de nuestros héroes blanquigranas. Pero este partido tenía un condimento especial, parece ser que los muchachos de Filo se había opuesto abiertamente a la incorporación de los de Psico al Championat. Esto toco las fibras intimas de más de un jugador de Psico, y el hecho de entender a Filo como “el rival más accesible de todos los enfrentados hasta el momento”, le daban a este partido un tinte de clásico. Desde Puán y Pedro Goyena, llegaban con trapos celestes y negros (y una guitarra criolla bajo el brazo) los “pesados” de Filo.
Las cosas estaban a priori dadas para esperar un gran encuentro, solo que había un hueco en los blanquigranas. Se aproximaba el pitazo inicial, y su dupla técnica (y también zaga central) no arribaba al estadio. Fue entonces, que Juan debió improvisar una charla técnica, y cargarse el equipo al hombro. Pero no fue lo único “desordenado” del día domingo. Tampoco arribaba Nico Xicoy, el arquero del equipo, lo que nueva obligó a improvisar un arquero. Esta vez, fue Samu quien tomó las investiduras de heroe y se calzó la número uno. Entonces, el conjunto blanquigrana (ya con su indumentaria completa), se planto en el campo de juego con varios cambios en su once inicial: Samu al arco (Antes jugaba de nueve), el Turco Nasif por la banda derecha, la zaga central compuesta por Gustavo y Alvaro Rafaldi, y por la izquierda el tanque Freiría; en el medio, por derecha Luquitas, como doble cinco Juan y Banegas, y por izquierda Facu; y adelante Hernán y Mateo. El planteo era el mismo de siempre, pero las variantes posicionales hicieron que más de uno se sintiera “perrrdido en la cannncha”- según comentara el bambino-. La falta de charla motivadora, el hecho de jugar en posiciones distintas, y la falta de orden en el fondo, tuvieron por resultado un desempeño por debajo de lo esperado para psico. Claro está, esto tiene dos responsables, Luciano Limone y Juan Menéndez L. “Nos quedamos dormidos” acusaron ambos técnicos, quienes faltaron a su compromiso de conducir al equipo. Un punto en contra para ambos. Con ese panorama, el arbitro dio el pitazo inicial.
Filo con poco, inquietaba a la dubitativa defensa de Psico. Gustavo estaba perdido abajo, y a Alvaro se lo notaba nervioso; pero parece ser que el más nervioso de todos era Samu Rafaldi, quien desde el arco gritaba incansablemente. El inconveniente es que gritaba no para alentar, sino para putear y marcar errores de mala manera a sus compañeros. Sabido es que la comunicación no puede fallar entre 15 psicólogos, pero los modos deben cuidarse, más sabiendo que el conjunto atravesaba una situación de emergencia, y no contaba con todas sus fichas. Esta actitud de Samu repercutió negativamente (no podía ser de otra manera) en todo el equipo, y el nerviosismo también llegó al medio. Banegas no podía hacerse dueño del medio, y se pisaba continuamente con Facu y Juan. Así fue que a los siete minutos del primer tiempo, llovió un centro desde la izquierda, y el numero seis ganó de arriba y metió un frentazo que se estrelló contra el palo. Era un aviso de lo que pasaría después. El equipo parecía tender a la entropía, era una masa uniforme y homogénea. En esa confusión, Filo encontró el gol que había buscado. La preparada, un centro a la boca del área chica, el arquero que duda, el jugador que se suelta de la marca, y el testarazo del numero siete al fondo de la red. Uno a cero a favor de los celestes, y la cosa pintaba fulera para psico. De todas formas, se veía que los celestes no tenían muchas ideas en ataque; usaban y abusaban del centro, y los blanquigranas no podían oponer mayor resistencia, a pesar de haber ganado altura en el fondo. Los tibios ataques de psico desembocaron en un tiro libre de Hernan, que contuvo sin mayores inconvenientes el guardameta de Filo. Los minutos pasaban, y de a poco psico iba acomodándose. Con este panorama, los dos equipos se fueron al descanso.
Allí estaban esperando los Dts, ambos con cara de maldormidos, e intentando esbozar una disculpa ante semejante falta. Pero esto no fue lo único que ocurrió en el entretiempo, Juan separó a Samu y tuvieron una charla sobre sus gritos hacia sus propios compañeros. Lucas (el grande) esperaba para entrar; Xicoy calentaba motores, pero ya no en su rol de arquero (donde sin dudas gravitaba y le hacia un gran bien al equipo) sino en su rol de delantero; y la zaga central asumía su rol en el equipo. Asimismo, Gustavo volvía a tomar el centro del campo, y Banegas se corría hacia la derecha, es decir: volvía a su habitat natural. En otras palabras, el equipo se acomodaba. Pero, una vez más estaba sin arquero, con un arquero improvisado. Todos sabíamos que Samu no es arquero, y que puso su mejor voluntad (aunque se equivoco con varias actitudes), pero esta ventaja la aprovechaba constantemente la gente de Filo. Las veces que lo probaron desde afuera, respondió, pero dando un rebote largo, que luego volvia a atrapar.
Los primeros minutos del segundo tiempo, encontraron a nuestros gladiadores blanquigranas mejor parados; empezaban a tener un poco la pelota e intentaban jugar. Pero le costaba mucho gravitar en ataque. A esto tenemos que sumarle que los celestes se pararon de contra, y con espacios podían hacer desastres en la dormida zaga central. Pero el turco Nasif se hizo amo y señor del lateral derecho, cortando con fiereza y limpieza de cirujano cuanto ataque hubo, y por el otro lateral, Mauro metía y metía, cortando sin parar. Así suplían las falencias de la zaga central, en especial del central oriental, quien tuvo una tarde negra; se lo vió lento, apesadumbrado, impreciso, creemos que producto del alcohol ingerido la noche previa y también el viernes en el asado del team. En el medio, con el correr de los minutos Gustavo volvía a encontrar su posición, volvía a pedir la pelota en la salida, a ser el dueño de la mitad. Por su parte, Xicoy no conseguía hacerse con la pelota arriba y bajaba hasta tres cuartos a buscar la bola; pero cuando la tenía, parecía no querer compartirla. Hernan estuvo perdido arriba, es muy difícil jugar sin la pelota, si no consiguen asistirlo, es casi imposible que pueda marcar (alguien vio algún gol sin pelota?). A los diez del segundo Juan cedió su lugar a Lucas, quien trato de asociar juego con los delanteros. El problema esencial del conjunto en el segundo tiempo, fue no asociar juego, no triangular. Parecía ser un montón de individualidades. Y atrás, la cosa era de temer. Fruto de errores defensivos, en varias oportunidades los delanteros de Filo quedaron en inmejorables posiciones de gol, pero su propia impericia hizo que la cuenta no aumentara. Se habían armado algunos duelos en el campo (como el que mantuvieron el 9 de filo y el 2 de Psico, que se trenzaron en mas de una; o el que enfrentó a Facu con el seis rival) que marcaban el clima de clásico que tenia el partido. Faltando diez, Gus Banegas pidió el cambio, y Mateo hizo su ingreso, pero una vez mas no se respetó la posición, y se paró como un tercer delantero. El desorden generaba huecos, y si bien la defensa se paró bastante más adelante, no conseguía suplir del todo bien ese hueco generado en el medio. El que descolló en el medio campo fue, una vez más, Gustavo, que tiró “un caño sublimee” sobre el lateral derecho del ataque de psico, puso la bola debajo de la suela derecha, llevó la globa hacia atrás ante la marca de Bobby Flores, y en el preciso momento en que Bobby sacaba la guadaña, Gus lo entubó con una pisada hacia delante… “eso ess una humillación puuublica, nene!!” se regocijó el Bambino. Pero claro, en la jugada siguiente llegó la expulsión del numero dos de Filo, quien salio desde el fondo a hachar literalmente a Gustavo. Roja directa, y el partido se calentaba aún más. Quedó tiempo para un tiro libre, que ejecutara el mismo Gustavo, y que el arquero contuvo sin mayor inconveniente.
Una ilusión que se posterga, pero lo triste es que haya sido por un problema organizativo (mayoritariamente). Solo resta continuar con el trabajo, y tratar de mejorar los aspectos disciplinarios fuera del campo de juego, y algunas otras actitudes para con el grupo de jugadores. La cuestión es que parece que nuestros gladiadores blanquigranas de a poco estan madurando el primer triunfo de Psico. A seguir remando, muchachos… un tropezón no es caída.


El Paredón

1- Mauro “Samu” Rafaldi (5) Tuvo buenas intervenciones, aunque dio rebotes. No salió nunca de los tres palos, y permitio que le cabecearan en el area chica. Nada de eso fue lo más grave, la falla grave estuvo en como trató a sus compañeros, no alentando, sino criticando. Queda por mejorar (y mucho) el aspecto comunicacional!
2- Alvaro Rafaldi (5) Se lo vio dubitativo abajo, no consiguió amoldarse a su posicion y terminó exhausto los primeros cuarenta minutos.
3- Mauro Freiria (5,5) Bastante desordenado durante el primer tiempo, pero constantemente puso marca y ganas. Con la pelota en los pies, se complicó en mas de una oportunidad, pero este periodico banca a los que intentan jugar! Fue uno de los puntos mas altos de la defensa.
4- Eduardo Nasif (6) Sólido, impasable, limpio y al mismo tiempo fiero. Marco con suma dureza durante los ochenta minutos, pero siempre con lealtad y limpieza. El más parejo en los ochenta, por eso la figura.
5- Gustavo (6) En el primer tiempo abajo estuvo desorbitado. Pero en el segundo paso a jugar en la posición que mas conoce. Ya entrado el segundo tiempo se cargo el equipo al hombro y lo empujo desde abajo. Se animó a tenerla (a veces demasiado) y tuvo en sus pies uno de los remates mas peligrosos. Nota aparte merece el caño gourmet que le metio al 10 celeste.
6- Luchito (5) Se notaba que estaba mal dormido, y aquejado por haberse quedado dormido. No fue el Lucho que todos conocemos, estuvo impreciso y un poco lento; de todas maneras cumplió.
7- Facundo (5,5) Un flojo primer tiempo, estuvo desordenado, se pisaba constantemente con los del medio, y la pelota no le llegaba. Cuando la tuvo se mostro nervioso. En el segundo tiempo cambió radicalmente. La pidió más, y se animó a jugar un poco más.
8- Gustavo Banegas (4,5) En el primer tiempo parecía tener un resorte en el botín, no pudo para ninguna; estaba como fastidioso. Claro está que no jugó en su posición, y eso se noto. Ya en la segunda mitad, mejoro su rendimiento, pero no fue el que todos esperamos. Demostró mucho compañerismo al pedir el cambio por su fatiga.
9- Hernan (5) No se movió tanto como otras veces, y en ningún momento pudo entrar en juego. Es cierto que depende mucho de lo que lo asista el medio, pero esta vez no se lo vio tan movedizo como en otras oportunidades.
10- Juan (5,5) Bien en la actitud de tomar las investiduras de los Dts e improvisar un criterio de futbol. Ya en la cancha, claramente se posicionó como el referente. En lo futbolistico, no gravitó como sabe hacerlo, porque la pelota parecía tener un conejo dentro, y el medio no la ponia al ras del suelo. De todas formas, se notó que siempre quiso intentar, y eso vale (y mucho)
11- Mateo (5,5) En la primera mitad presionó constantemente la salida, corria de forma incansable, pero tambien desordenadamente, lo cual tornaba todo ese esfuerzo en improductivo. Hay que presionar entre todos la salida, nunca de a uno, porque así vas a fundir motores muy pronto. De todas maneras, es rescatable la actitud, y el entusiasmo que pone. Le quita algo de puntaje lo desordenado del segundo tiempo.
12- Nicolas Xicoy (4) Llegó con demora, y no se hizo cargo del arco. Trató de demostrar que puede ser productivo dentro de la cancha, y los tecnicos le dieron una oportunidad. Sin ninguna duda, el equipo lo necesitaba más bajo los tres palos que en la delantera. No solo no gravitó, sino que además no soltó la pelota. Debería reconsiderar su vinculo con el grupo, el cual creo que está a tiempo de salvar.
13- Juan (Uru) (4) Sin dudas, lo peor de abajo. Pifió más de lo que acertó en los cierres, pero el sabe que si no va con fútbol, le hace “la psicológica” a los rivales, y trenzándose en su duelo con el nueve, lo sacó del partido. Pegó de lo lindo, a falta de futbol, en el fondo, bueno es el rigor. De todas maneras, se castiga con el puntaje la impuntualidad, además del mal juego. Habrá que mejorar, y dejar de chupar.
14- Lucas (5) Se notaba que tenia ganas, pero en el medio no podía tomar la posta de Juan. La pelota le llegó poco, pero siempre trató de asociar juego. Esa actitud es la que premiamos, la concepción del fútbol como juego de equipo, donde resulta más facil, simple y al mismo tiempo vistoso tocar el balón que intentar la personal. Siempre intentar vale mas que no hacerlo, ya va a salir Lucas.



--Como lo vi -- (GM)

Psico deperdició un partido que en los papeles era accesible, y en la cancha resultó aún más que accesible, merced a la indisciplina y la desorganización. Habrá que entender que la disciplina es importante, que hay que llegar un rato antes, así como también es importante la comunicación entre el grupo, y el vínculo que el grupo tiene entre sí. Hay muchas cosas por mejorar, pero a no desalentarse, se puede mejorar. Desde la redacción de este boletín informativo (y de opinión) pensamos que sin duda hay un gran potencial, habrá que ir puliéndolo, y trabajándolo día a día, pero se puede.